Enfermería se abre a flexibilizar la ley de ratios para fijar unos mínimos

Lo ideal sería que estos profesionales tuviesen asignados entre ocho y seis pacientes

Laura África Villaseñor, representante de la Comisión Promotora de la iniciativa y presidenta de Satse.

23 sep 2024. 17.00H
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La defensa de la Proposición de Ley sobre Ratios de Enfermeras ha llegado a la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados para evitar llegar a una prórroga número 84. Según Laura África Villaseñor, representante de la Comisión Promotora de la iniciativa y presidenta del Sindicato de Enfermería Satse, la pretensión se centra en redactar una ley "flexible" en el marco competencial autonómico. "No tiene que ser exactamente la que está recogida en el texto, pero sí necesitamos garantizar unos mínimos seguros", ha explicado, con la finalidad de "garantizar la seguridad del paciente" y mejorar las condiciones del personal de Enfermería, que actualmente tiene asignados entre 15 y 20 pacientes, cuando deberían tener seis, "ampliables a ocho en situaciones excepcionales", tal y como ha detallado Villaseñor.  

Esta Proposición de Ley sobre Ratios de Enfermeras llega en un contexto marcado por la sobrecarga asistencial en los servicios sanitarios, una situación que pone en riesgo a la salud pública. “Cuando las enfermeras nos vemos obligadas a atender a demasiados pacientes a la vez, los pacientes corren un mayor riesgo de sufrir errores sanitarios evitables, complicaciones evitables, úlceras por presión, mayor duración de la estancia hospitalaria, mayor número de reingresos e incluso fallecimientos”, ha explicado Villaseñor.

Si traducimos estos datos a cifras, según Villaseñor, por cada paciente adicional asignado a una enfermera que supere el límite de siete, la tasa de mortalidad se incrementa en un 4 por ciento. Además, la escasez de enfermeras en los hospitales eleva el riesgo de fallecimiento en un 13 por ciento.

“Los servicios de salud han establecido el número máximo de pacientes que puede atender el médico de Atención Primaria en consulta durante su turno, es de sentido común y lógico. Pero entonces, ¿Por qué resulta tan complicado hacer entender o hacer comprender esta necesidad cuando hablamos de enfermeras?”, ha planteado Villaseñor.


“Flexibilidad” para la sanidad de las CCAA


La propuesta concreta de la ILP llega para establecer unos ratios mínimos tanto para el ámbito hospitalario como para la Atención Primaria. En los hospitales, plantea que cada enfermera no tenga asignados más de seis pacientes, aunque en situaciones excepcionales este número podría ampliarse hasta ocho. En atención primaria, se ha propuesto que el número de habitantes por enfermera no supere los 1.500. “Es fundamental fijar estos límites para garantizar una atención segura y de calidad”, ha declarado Villaseñor.

No obstante, la presidenta de Satse también ha reconocido que estos ratios pueden ser revisados y ajustados durante la tramitación parlamentaria, para ajustarse a las competencias de las comunidades autónomas, siempre y cuando se mantenga el compromiso de garantizar unos “mínimos” que eviten la sobrecarga de las enfermeras y, por ende, los riesgos asociados para los pacientes.


Dudas ante la Ley de Ratios de Enfermería


A pesar de que ha sido una propuesta bien recibida por los Grupos Parlamentarios presentes en la Comisión de Sanidad, algunos, como el Grupo Vasco, han anticipado su intención de “estudiar” más a fondo esta ley. “Tendremos en cuenta a quién corresponde el ámbito competencial, porque ordenar los ratios y el personal necesario en el sistema de salud le corresponde a cada comunidad autónoma”, ha sentenciado Maribel Vaquero, portavoz sanitaria de PNV en el Congreso. Por su parte, Iñaki Ruiz (EH Bildu) se ha cuestionado si existen motivos aparte de los económicos para que el debate sobre la fijación de una ratio en enfermería se haya aplazado durante años.

Quienes sí han avanzado su apoyo a esta propuesta han sido el Grupo Republicano en el Congreso y Vox. Según Inés Granollers, portavoz sanitaria de ERC en el Congreso, uno de los principales motivos para ello es proteger la calidad de la asistencia sanitaria, especialmetne en Atención Primaria, para que no se produzca una “sobrecarga innecesaria”. “Es cierto que las enfermeras sufren una sobrecarga de trabajo crónica debida a la falta de personal, una situación que genera estrés y que hace que aumenten los índices de baja laboral y disminuya la calidad del servicio”, ha añadido.

Por su parte, David García Gomis, portavoz sanitario de Vox, también ha denunciado que “el ratio de enfermera por paciente” está por encima que la media europea, lo que hace que nuestro Sistema Nacional de Salud esté dejando de ser “el mejor del mundo”. “Hemos creado 17 sistemas autonómicos que están siendo unos generadores de desigualdad”, ha comentado. “Ahora nos encontramos con el ego de los partidos nacionalistas que son incapaces de buscar una solución para todos”, ha añadido.

Candela López (Sumar), ha querido recordar a la presidenta de Satse que las negociaciones con los sindicatos están avanzando en buen sentido y que todos los temas que ahora son “asignaturas pendientes” se están tratando. “Desde el Ministerio de Sanidad, en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS) se está trabajando en un modelo más detallado que tenga en cuenta las complejidades y que establezca las recomendaciones de las enfermeras”, ha señalado.

En la misma línea, desde el Grupo Socialista ha intervenido Modesto Pose para afirmar que la escasez en Enfermería debe tener un abordaje “más holístico” que permita evaluar adecuadamente “las competencias y el desarrollo profesional” de estos trabajadores. Aun así, ha añadido que, por el momento, no disponen de “elementos del juicio suficientes para fijar un ranking” aunque no ven motivo para oponerse al debate de esta proposición. “Nosotros intentaremos en la medida posible que salga adelante”, ha sentenciado.

Por último, María del Mar Vásquez, del Grupo Popular, ha destacado que esta iniciativa requiere “mucha planificación” para llegar a un acuerdo con las comunidades autónomas. “Las necesidades de la población son muy diversas” y varían según los centros sanitarios y sociosanitarios, por lo que ha señalado. “Yo he hecho en falta mayor desarrollo de este aspecto”, ha añadido.

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