El primer intento para llegar a un
gran acuerdo sanitario en el Senado ha fracasado al no contar con el apoyo del Partido Popular, con mayoría en esta cámara.
La moción presentada por el PSOE aborda cuestiones como devolver el carácter universal a la sanidad, recuperar mecanismos de financiación como el Fondo de Cohesión, terminar con la precariedad laboral de los sanitarios y modificar la norma sobre prescripción enfermera.
El debate ha puesto de manifiesto la divergencia entre el PP y PSOE en asuntos como la
universalidad o la prescripción enfermera, pero también ha servido para mostrar algunos atisbos de consenso en temas como
la muerte digna e incluso en
mecanismos de financiación, se llamen
Fondo de Cohesión, Fondo de Garantía Asistencial o fondo sanitario.
Tras el debate parlamentario,
el PP ha presentado un texto de consenso de 10 puntos que no ha sido aceptada por el PSOE. El problema está en que, a diferencia del Congreso, en el Senado no se pueden votar las iniciativas por puntos, sino que deben aceptarse o rechazarse en su totalidad, algo que ha impedido acordar asuntos concretos.
Según ha explicado a Redacción Médica
José María Olmos, portavoz de Sanidad del PSOE en el Senado, sí había acuerdo en puntos como que "aceptaban que se restituyera el Fondo de Cohesión y que se pagaran los medicamentos huérfanos con cargo a ese fondo y se aceptaba debatir una ley de muerte digna".
De hecho, en su última intervención,
Antonio Alarcó, portavoz de Sanidad del PP en el Senado, llamaba al acuerdo y planteaba la creación de una mesa de trabajo mixta entre el Consejo y el Senado "que aborde el conjunto de medidas y reformas para buscar el máximo consenso". Una herramienta que podría desembocar en un "
pacto por la sanidad con el consenso de los grupos parlamentarios para dar respuesta a desafíos como la universalidad, la calidad, la equidad y la sostenibilidad del sistema de salud".
Desacuerdo en prescripción enfermera
El desacuerdo ha llegado en temas como la
prescripción enfermera, que el PP no ha incluido en la enmienda, y en la propuesta para restituir la universalidad. Precisamente una de las enmiendas que sí ha aceptado el PSOE ha sido la de Unidos Podemos que llamaba a derogar el
Real Decreto 16/2012.
Esto no ha bastado para el PNV que se ha abstenido porque "las dudas no se disipan lo suficiente para darles nuestro apoyo". Estas reticencias partían acerca de qué propone el PSOE exactamente con su
"revisión de copagos" ya que la postura del PNV es la de eliminarlos completamente. También pedían
suprimir las tasas de reposición y mayor concreción en cuanto al Fondo de Cohesión y al Fondo de Garantía Asistencial.
El PSOE ha rechazado también la enmienda del senador del Grupo Mixto, Carles Mulet, que proponía incluir
una ley de eutanasia. "No estamos en contra de este debate, pero es una cuestión diferente al de las medidas de muerte digna", ha explicado Olmos. A pesar de no aceptar su enmienda, Mulet ha votado a favor de la iniciativa del PSOE.
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