El PP pide otro Plan Profarma y una reserva europea de material sanitario

Cuando el Congreso de los Diputados planteó y puso en marcha la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica tras la crisis sanitaria del coronavirus Covid-19 configuró tres mesas sectoriales: la de sanidad, la de servicios sociales, la económica y la de la Unión Europea. A partir de ellas, se tenían que organizar grupos de trabajo y comparecencias de las que cada partido presentaría sus propuestas. Ahora, los partidos han hecho públicos sus proyectos para la ‘nueva normalidad’ y, en el área económica, social y europea, el PP ha propuesto más medidas de protección y continuar con una política de “prevención” ante posibles rebrotes.

Así consta en los tres documentos de las respectivas áreas específicas a los que ha tenido acceso Redacción Médica y en los que, entre otros aspectos, se proyecta la necesidad de que Europa mejore los instrumentos que garanticen una respuesta “común, coordinada y eficaz” ante posibles rebrotes. Por ello, proponen instar a la UE a tener un fondo de ha”existencias comunes de equipos, materiales y medicamentos” que puedan movilizarse con rapidez a cualquier punto de la Unión Europea.

DOCUMENTO | Acceda aquí a las peticiones del PP en el área económica

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Un proyecto que se complementa con el plan EU4Health en el que se debe poner en marcha, según los populares, un protocolo para “responder de forma común y coordinada ante cualquier tipo de crisis sanitaria global”. En este sentido, aseguran que "es necesario” reforzar la eficacia del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) y de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) para que puedan coordinar las respuestas médicas en tiempos de crisis.

Insisten en la necesidad de un Plan de Renovación Tecnológica

El PP ve necesario reforzar la Agencia Europea de Medicamentos (EMA)

Un proyecto que va muy en línea con sus medidas sanitaria, en las que aseguran que la industria farmacéutica y la de tecnologías sanitarias han de considerarse “aliadas estratégicas” del sistema sanitario a la hora de poner la innovación al servicio de los ciudadanos.

"La generación de sinergias entre las administraciones sanitarias y la industria, es esencial para favorecer una respuesta satisfactoria y sostenible a las necesidades asistenciales crecientes y cada vez más complejas”, aseguran haciéndose eco de algunas de las peticiones de los comparecientes que han acudido a estas comisiones.

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Consiguientemente, recuerdan la importancia de una actualización del Programa Profarma así como los incentivos fiscales “en particular los relativos a medicamentos huérfanos”. El PP considera impresincidlebe la elaboración de un mapa tecnológico de necesidades junto a las Comunidades Autónomas y poner en marcha un Plan de Renovación de Tecnología Sanitaria, medida que va de la mano con poner en marcha una Agencia de Evaluación de Medicamentos y Tecnologías “independiente y profesional con capacidad decisoria, similar a la NICE británica". 

El peso de la sanidad privada y de las empresas biotecológicas

"Hay que reducir la dependencia frente a otros países para garantizar stock de productos"

Los populares solicitan también que en la nueva normalidad se pongan en marcha “líneas de colaboración con la industria farmacéutica de medicamentos genéricos y la de los biosimilares, así como con el sector de las empresas españolas biotecnológicas y de tecnología sanitaria con el objetivo de favorecer el autoabastecimiento o reducir cuanto menos la dependencia frente a otros países para garantizar ‘stock’ de este tipo de productos”.

Ante futuras emergencias de salud pública o nuevas ondas epidémicas es creen necesario establecer una “Reserva Estratégica de Productos Sanitarios Críticos”, en coordinación con el sector tecnológico sanitario.

Sobre el papel de la sanidad privada, el PP recuerda que los hospitales y centros sanitarios privados han colaborado intensamente en la gestión de la pandemia. Por ello, solicitan que “requieren una cierta actualización en consonancia con el tiempo transcurrido desde que se aprobó la Ley General de Sanidad en 1986, configurando líneas ágiles y transparentes para desarrollar su papel de apoyo dentro del sistema sanitario”.