El desarrollo de la aplicación
Radar Covid ha supuesto el desembolso de más de 4,2 millones de euros de dinero público. El Gobierno ha difundido la factura por la puesta en marcha, el mantenimiento y la difusión de esta herramienta diseñada para tratar de facilitar la
detección de los contactos estrechos de las personas contagiadas de coronavirus en los primeros compases de la pandemia.
El Ejecutivo ha informado en
una respuesta parlamentaria a Ciudadanos de que el presupuesto total dirigido para esta área ha ascendido hasta los
4.265.499 euros que se han repartido para financiar diferentes partes del proyecto. Solo para el desarrollo de la aplicación móvil se llegaron a destinar un total de
330.537 euros con el IVA incluido.
El contrato para el
mantenimiento, el soporte y la evolución de este sistema de rastreo ha ascendido hasta los
1.740.101 euros. Mientras que la partida más abultada ha sido la establecida para la colaboración y la ejecución del
plan de medios con el objetivo de darle visibilidad:
2.166.402 euros. También se han destinado otros 28.459 para la elaboración de los materiales para la creatividad de la campaña.
El Gobierno ha aprovechado su respuesta parlamentaria para reafirmarse sobre el proyecto que considera que está avalado por
“los informes de diversas instituciones de reconocido prestigio a nivel internacional donde queda patente la eficacia de las aplicaciones de rastreo automático como un complemento al rastreo manual".
El Gobierno se aferra al Radar Covid
Los autores de la respuesta han recordado que el proyecto de
Radar Covid salió adelante después de que se realizase una prueba piloto en San Sebastián de La Gomera que estableció que la herramienta es capaz de detectar hasta seis contactos estrecho de cada caso confirmado de Covid-19 gracias a su
tecnología bluetooth.
El Gobierno incidido además en que la puesta en marcha de la aplicación ha permitido a España ingresar dentro de la
red eHealth de la Unión Europea, en la que se realiza un “análisis y seguimiento continuo del funcionamiento de estas aplicaciones en todos los países miembro a partir de su implementación”.
El diputado de ciudadanos que había formulado la pregunta
, Pablo Cambronero, ha tildado como
“nefasta” la iniciativa después de conocer el desembolso que ha supuesto para las arcas públicas y ha advertido de que continuará recabando información para revelar las personas que se han beneficiado del proyecto.
“Su utilidad ha sido 0 y no me dicen quién/nes se lo han llevado calentito”, ha expuesto en Twitter.
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