Ha pasado un año desde que se decretase el Estado de Alarma. Un año en el que los profesionales han estado en primera línea enfrentándose al Covid-19. En la Cámara Baja, los portavoces sanitarios de los distintos grupos han acudido a la Comisión de Sanidad en innumerables ocasiones para aportar su grano de arena.
Algunos diputados, profesionales sanitarios, han puesto sobre la mesa propuestas concretas frente a la crisis sanitaria que ha causado ya 72.258 muertes y 3.183.704 contagios, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad. Un año después de que que se declarase la pandemia, Redacción Médica habla con Ana Prieto, farmacéutica y portavoz del PSOE; Rosa Medel, oftalmóloga y portavoz de Unidas Podemos; y Elvira Velasco, enfermera y portavoz del PP. Este periódico se ha puesto en contacto con Vox y Ciudadanos sin que estos grupos hayan contestado a las preguntas al cierre de la edición.
¿Cómo recuerda aquel 14 de marzo de 2020 en el que se decretó el Estado de Alarma por la crisis del Covid-19?
Ana Prieto: Lo recuerdo como el momento histórico que fue. Todavía no sabíamos bien la magnitud de la crisis sanitaria que se venía encima; pero que el presidente Sánchez tomase la decisión de declarar el Estado de Alarma daba la medida de algo muy grave. Algunos estudios cifran en medio millón de vidas salvadas gracias al confinamiento temprano. Echando la vista atrás, agradezco la valentía del presidente para tomar una medida de tantísimo calado.
Rosa Medel: Sabía que el presidente anunciaría el Estado de Alarma. Pero hasta que no oí el discurso no me di cuenta del alcance de las medidas. Sinceramente me tranquilizó. Por primera vez en mi vida sentí que un Gobierno, si tiene voluntad, puede ser un verdadero paraguas protector de toda la sociedad.
Elvira Velasco: Lo recuerdo con mucha indignación, el Ministerio de Sanidad el día 2 de marzo nos indicaba que el escenario era de contención (nivel 1), que no había transmisión comunitaria descontrolada ni una entrada masiva de casos importados y estaban estudiando subir a una fase de mitigación. En esas fechas ya había indicado a los profesionales sanitarios que no celebraran reuniones, ni jornadas que concentrarán a un número elevado, permitieron el 8 de marzo las manifestaciones, los profesionales sanitarios no tenían material de protección y en España ya teníamos transmisión comunitaria. El 14 de marzo se vivía una situación de caos ante un Gobierno que no había hecho caso a las alertas internacionales.
¿Dónde realizó el confinamiento? ¿Cómo recuerda esos días?
Ana Prieto: Me confiné en Lugo, en mi ciudad. Los recuerdo con una mezcla de tristeza, de incertidumbre y de esperanza. No puedo dejar de pensar en las personas que durante esta crisis sanitaria se han contagiado e incluso han fallecido a causa de esta enfermedad. Y en las personas que lo han pasado solas. Desde hace un año todo el trabajo que hemos venido realizando en el Congreso ha tenido siempre la vista puesta en evitar más sufrimiento innecesario para tantas familias. Siempre me acompañará el recuerdo de los viajes para asistir las Comisiones de Sanidad de cada semana. Y el día que los niños salieron a la calle.
Rosa Medel: En mi casa. Mientras tanto mi marido iba a trabajar todos los días al hospital. Me pasaba los días leyendo acerca de la pandemia, viendo el canal parlamentario y haciendo entrevistas con formato telemático. Mi marido al volver a casa me contaba todo lo que había vivido en el hospital, destacando el gran esfuerzo y trabajo de todo el personal sanitario.
Elvira Velasco: En mi casa en Zamora, y lo recuerdo con mucha tristeza y preocupación por encontrarme con una ciudad fantasma al igual que el resto de España y por otro lado muy pendiente de lo que estaban viviendo mis compañeros en el hospital, desde la presión asistencial hasta la falta de material de protección para poder desempeñar su trabajo correctamente, sus excesos de jornadas o sus miedos al llegar a casa y poderles trasmitir el virus a sus familias. Por otro lado destacaría la gran solidaridad con todos los profesionales sanitarios y esos aplausos a las 8 de la tarde.
¿Ha tenido algún contagio cercano?
Ana Prieto: Una de mis tres hijas, se contagió, y pasó la Covid, sin síntomas apenas. Vaya mi admiración solidaridad y cariño a todos nuestros adolescentes; como todos lo hemos sido, ellas y ellos también han sido golpeados por esta pandemia, y pese a las grandes dificultades y a todo lo que el virus les ha “robado”, nos han enseñado con una mezcla de juventud y madurez, que se pueden encontrar diferentes maneras de afrontar este reto que nos ha traído este “maldito” virus.
Rosa Medel: Sí, dos familiares que afortunadamente están bien. Han muerto dos vecinos amigos del barrio.
Elvira Velasco: No.
¿Qué ha aprendido personalmente de la crisis del Covid-19?
Ana Prieto: La pandemia ha entrado en nuestras vidas como un tsunami, marcando un antes y un después. Hemos pasado un año de incertidumbre, en el que la esperanza se ha ido abriendo paso, gracias a la ciencia que de la mano de la política nos van a sacar de esta terrible pandemia. Y la solidaridad, tan necesaria.
Rosa Medel: Que sin una sanidad pública bien dotada no podemos vivir. La pandemia ha revalorizado el concepto de sanidad pública. Los servicios públicos compensan la desigualdad social. Y lo fundamental de la sanidad pública son los profesionales sanitarios. Les debemos todo y debemos corregir el maltrato soportado por años de recortes en sanidad.
Elvira Velasco: Que situaciones como estas nos llevan a cambiar nuestros hábitos de vida a todos los niveles personales, profesionales, con los amigos, porque estamos conviviendo con un virus, el Sars-Cov-2 muy contagioso y muy desconocido.
¿Cómo ha vivido el trabajo de la sanidad española?
Ana Prieto: Con emoción y, sobre todo, con orgullo. Si hoy estamos más cerca de salir de esta crisis sin precedentes es gracias al trabajo incansable de tantos y tantas profesionales sanitarias. Tenemos suerte de contar con estos profesionales que se han dejado todo para cuidarnos. En el Congreso hemos trabajado, tanto en la Comisión de Sanidad como en la de Reconstrucción, para hacer un buen análisis de la situación de la sanidad pública con el que afrontar los retos del futuro. Nuestro trabajo se debe centrar, prioritariamente, en transformar ese orgullo, esos aplausos de las 8 de la tarde, en una sanidad pública más fuerte. Se lo merecen ellos y ellas y lo necesitamos los ciudadanos y ciudadanas.
Rosa Medel: Tengo un conocimiento profundo de la práctica clínica médica porque he trabajado en un hospital hasta enero de 2020. He estado en contacto con mi servicio en Valencia y conozco todo lo que ha pasado. Los servicios han sabido transformarse y hacerse polivalentes. Han salvado muchas vidas.
Elvira Velasco: Con mucho orgullo por los grandes profesionales que tenemos trabajando en ella, por como se han organizado aunque estuvieran trabajando en especialidades muy diferentes para formar los equipos Covid y atender a todos los pacientes, por como han adaptado espacios sanitarios para atender a pacientes Covid y lamentando la desprotección y falta de EPIs, mascarillas, guantes... que llevó a que muchos sanitarios se contagiaran. Son ya más de 130.000 y 121 han fallecido por la Covid, ayer mismo el jefe de Servicio de Dermatología de Zamora.
¿Qué balance hace del último año a nivel sanitario?
Ana Prieto: Aquí quiero diferenciar entre dos aspectos. Uno el trabajo de los y las profesionales, que como le digo está siendo de 10. Tenemos la suerte como país de contar con unas personas con una cualificación y una entrega innegable y contar con un sistema sanitario público capaz de responder a una pandemia de forma ejemplar. Por otro lado, el balance político es muy positivo también. Los últimos PGE, históricos en materia de sanidad, demuestran el compromiso del Gobierno por fortalecer nuestra sanidad pública. Porque ya lo hemos visto: cuando falla la salud, falla todo lo demás. Garantizar el acceso de toda la población a una sanidad pública de calidad es el mejor cimiento que podemos poner para el futuro.
Rosa Medel: La pandemia ha puesto de manifiesto que la sanidad no es un gasto sino una inversión. Todos defienden esto como si fuera un eslogan, pero no todos tenemos la misma idea de cómo debe ser esa sanidad. La sociedad quiere una sanidad eficiente que le defienda y lo más eficiente es la sanidad pública de gestión directa. Las políticas de recortes del PP junto a la desviación de dinero público al beneficio privado son lo más opuesto a la eficiencia. Los recortes han estado a punto de acabar con un buen sistema sanitario porque han supuesto la precariedad laboral y la sobrecarga de trabajo de los sanitarios. Esto no se puede repetir.
Elvira Velasco: El balance que hago como portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso es negativo, porque hemos ofrecido un Pacto por la Sanidad al Gobierno y no ha sido posible. Estamos viviendo la mayor crisis sanitaria que ha desembocado en una fuerte crisis económica y social y al margen de los Estados de Alarma no hemos elaborado un marco normativo adecuado para facilitar la gestión a las comunidades autónomas en situaciones de pandemia. El Gobierno siempre ha ido detrás del virus, no se ha anticipado a nada, no ha asumido la responsabilidad que tiene por estar en una situación de pandemia. Desde el Congreso hemos establecido una hoja de ruta con las Conclusiones en materia sanitaria acordadas en la Comisión de Reconstrucción Social y Económica, ahora le toca al Gobierno ejecutarlas, porque después de ocho meses aún no ha hecho nada.
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