Alarcó: "España necesita un Plan Nacional de Pandemia"

El portavoz sanitario del PP en el Senado apuesta por crear un retén con protocolos ante casos como el Covid-19

Antonio Alarcó.

16 jun 2020. 16.00H
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POR I. P. NOVA | JOANA HUERTAS
Antonio Alarcó, médico y portavoz del Partido Popular en la Comisión de Sanidad del Senado, lleva años siendo la voz de los populares en la Cámara Alta. Durante esta epidemia no ha dejado de lado su faceta política y tampoco la sanitaria, pues ha estado combatiendo el virus desde los dos frentes: en el quirófano y en el escaño. 

Ahora, suma su perspectiva al documento 'Lecciones del Covid-19'. Una visión crítica con el Ejecutivo pero también con China, a quién acusa de haber sido el origen de hasta siete coronavirus.

¿Cuáles son los aciertos y errores que considera que se han cometido durante esta crisis?

Habría que matizar que la pandemia, como su propio nombre indica, es un problema global que nace en China. Sobre esto, habría que analizar lo que está ocurriendo en ese país (aunque sea uno de los financiadores 'número 1' de la Organización Mundial de la Salud) porque es el séptimo coronavirus que nace en este territorio. Algo que ocurre de forma claramente sospechosa, por ser un régimen no democrático.

El portavoz del PP critica la tardanza de China para comunicar el primer caso

En concreto, China tardó dos meses en comunicar a la comunidad internacional el primer caso. Debido a la trazabilidad 1-4, la única forma de controlar a los vectores (ciudadanos) era actuar rápidamente aislando el foco primario. Eso no se hizo a tiempo en origen y, a partir de ahí, se empiezan a producir una serie de acontecimientos que han provocado un colapso en los sistemas sanitarios y un aumento del número de fallecidos por esta causa. Ya en España, y una vez que la OMS declaró primero una epidemia grave y después una pandemia, el mando único actuó mal, tarde y sin que conociéramos ningún criterio científico que lo avalara.

Estuve en el comité ejecutivo de la OMS en Ginebra los primeros días de febrero, como uno de los invitados del Colegio Internacional de Cirugía, del que soy vicepresidente mundial, y claramente se definió que el aislamiento, y posterior confinamiento, sería la primera medida a tomar de forma urgente. No se hizo y se permitió convocar el 8-M (una bomba biológica con una carga viral masiva sobre cientos de miles de ciudadanos), convirtiéndose en una de las causas fundamentales del posterior colapso sanitario, el aumento del número de fallecidos o el contagio de los profesionales.

La ausencia sistemática de test masivos, de medios de protección para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, para los sanitarios y para los ciudadanos en general, así como la ausencia de un mapa epidemiológico completo que detecte los asintomáticos positivos, ha sido decisivo. También la ausencia de criterios con evidencia científica correcta y la falta de transparencia de los mismos.

"Es imprescindible hacer simulacros y pruebas de estrés a todo el sistema"

En definitiva, la tardanza en decretar el estado de alarma, permitir manifestaciones masivas, no contar con mapas epidemiológicos, ni criterios científicos, son errores de consecuencias evidentes.

Una vez que, de forma tardía, se declara el confinamiento de la población (que ha sido una medida que se tenía que tomar de forma clara pero cuya duración y criterios han sido un despropósito), se ha evidenciado la ausencia de transparencia del Gobierno, como por ejemplo, a través de la supresión del portal de transparencia.

Ante una crisis similar futura, ¿qué medidas deberían adoptarse ya de forma preventiva en cuanto a recursos humanos, recursos materiales, y gestión / organización?

Para que las cosas funcionen bien durante una emergencia, primero tienen que funcionar en la normalidad, principio básico de la Medicina y la Salud Pública. Para ello, es imprescincible hacer simulacros y pruebas de estrés a todo el sistema.

Los localismos en sanidad y salud pública tienen poco valor y no resuelven nada, por lo que creo que debería de impulsarse un Plan Nacional de Pandemia como está reflejado en el documento de 2003 del Ministerio de Sanidad (que, por cierto, debería de llamarse de Salud). Asimismo, es necesario crear una central europea de compras e implicar al distrito único sanitario europeo para futuras pandemias.

Alarcó insiste en la necesida de crear una central europea de compras para futuras pandemias

En España sería necesario crear un retén con protocolos y, como los cargos no hacen a las personas, sería necesario profesionalidad en todos los pasos de la gestión de epidemias y pandemias.

¿Qué podría haber aportado el entorno del parlamentarismo que no haya podido por la premura en el estallido de la crisis?

Nuestra organización tiene una Comisión de Sanidad y Seguimiento de la pandemia formada por un equipo multidisciplinar con profesionales de gestión y experiencia profesional, tanto sanitaria, como económica, política y turística. Desde el primer día, puso a disposición de este Gobierno la colaboración transparente con medidas concretas: mando único competente, mapa epidemiológico de forma imprescindible, mapa seroinmunológico (y, por tanto, test masivos para todos los ciudadanos hasta que no haya vacuna), mascarilla sistemática, reserva de medicamentos antivíricos, criterios claros y transparentes de ingreso en UVI, así como un informe ético de profesionales sobre gestión de pandemia. Pero se le hizo poco caso. El coronavirus no tiene ideología y las medidas a tomar siempre tienen que estar basadas en evidencia científica.

Asimismo, apoyamos el estado de alarma y solicitamos un mando único para que, de alguna forma, disminuyese el nivel de contagios y el número de fallecidos, y se redujera el colapso sanitario. Pero tristemente se utilizó también para causas ajenas a la pandemia. Seguiremos trabajando en primera línea y colaborando para que las medidas que se tomen sean las correctas. Para todo esto, es imprescindible un Gobierno leal y transparente.

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