"No se consesuan con ellos el tratamiento, ni se les implica tanto en la recuperación como a otros pacientes". Son palabras de Marcelino López, director de Programas, Evaluación e Investigación de la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (Faisem) en un foro de debate organizado por Hermanas Hospitalarias.
"Estas actitudes las mamamos desde pequeños, no lo hacemos conscientemente", ha explicado López. En su opinión, la atención social-sanitaria en España es muy deficitaria de cara a los pacientes con enfermedades mentales, pues "el presupuesto que se destina es mucho menor comparado con otros países del entorno".
En este sentido, Nel Anxelu González, presidente de la Confederacíon Salud Mental España, ha asegurado que "quedan infinidad de recursos y profesionales sanitarios por conseguir para el sistema público sanitario".
La estigmatización, tan antigua como la Humanidad
En pleno siglo XXI, todavía persisten en la sociedad estereotipos y prejuicios negativos hacia las enfermedades mentales. "Quizás el ejemplo que todos conocemos es el holocausto nazi, durante el cual gaseaban a estos enfermos, pero hay multitud de casos donde se les marginaba y discriminaba, como en el Imperio Romano y en la propia época de lnquisición", en palabras de Anxelu. Lo cierto es que la historia no ayuda y hoy en día este colectivo está señalado como "violento y contagioso", ha sentenciado López.
A esto hay que sumar un sentimiento de miedo y desconfianza que desemboca en una propensión a la discriminación. Todo ello tiene un origen para el representante de la Conferación Salud Mental: "el desconocimiento de la enfermedad". Y desemboca, añade, "en una marginación del colectivo".
En sentido, Maria Dolores Romero, presidenta de la Federación Andaluza de Asociaciones de Usuarios de Salud Mental En Primera Persona, ha asegurado que "existe una vulneración de derechos cotidianos a diario y esto desarrolla un sentimiento de culpa en este colectivo. Romero cree que como cualquier otro grupo minoritario al que se están vulnerando sus derechos, "hay que salir del armario y dar el primer paso para la visibilización del colectivo".
También estaba presente en el foro una paciente de Hermanas Hospitalarias, Carla Areal, quien ha relatado cómo se vulneran sus derechos a diario. "Además de estar enfermo, padeces otra carga, la de la estigmatización de la sociedad", ha relatado.
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