"Poner un psicólogo en cada centro de salud costaría menos de 200 millones"

Los trastornos de salud mental son la pandemia del siglo XXII. Según el último Informe Anual del Sistema Nacional de Salud, el 34 por ciento de la población española tiene algún problema de este tipo. La incidencia de la ansiedad, el estrés o la depresión incrementa en la sociedad, lo que se traduce en un aumento de la presión asistencial en muchos puntos de la red de hospitales y centros sanitarios de titularidad estatal. El primer impacto lo reciben los servicios de Atención Primaria. Un ámbito en el que los psicólogos escasean. Un contratiempo para el que el Consejo General de Psicología (COP) tiene una solución numérica: una partida anual de menos de 200 millones de euros.

Los cálculos realizados por el organismo profesional indican que esta cifra sería suficiente para que hubiese un psicólogo en cada centro de Atención Primaria del país. De esta forma, se garantizaría la presencia de un profesional de salud mental en cada una de las 13.058 unidades del primer nivel asistencial existentes actualmente en España.

Actualmente, no todas las comunidades autónomas reconocen la figura del psicólogo en Atención Primaria. Asturias, Cantabria, Baleares, Cataluña, Madrid, Andalucía, La Rioja, Comunidad Valenciana, Canarias, Navarra y Castilla y León son las regiones que han incorporado esta figura al mencionado servicio. Por el contrario, Galicia, Aragón, Murcia, Castilla-La Mancha y Extremadura todavía no lo han hecho. País Vasco valora la posibilidad.

"No todas las comunidades autónomas reconocen la figura del psicólogo en Atención Primaria"

Pese a formar parte del servicio, tampoco todos los servicios incluyen a estos profesionales dentro de los propios equipos de Atención Primaria. En concreto, solo Canarias lo hace, según la información recogida en la Evaluación del Plan de Acción de Atención Familiar y Comunitaria, elaborado por el Ministerio de Sanidad. En este, se indica también que Asturias, Madrid y la Rioja contemplan a estos sanitarios como parte de las unidades de apoyo del primer nivel asistencial.

Ausencia en la estrategia nacional

Una situación que tampoco se ve favorecida por la ausencia de los psicólogos en el Plan de Acción de Atención Primaria y Comunitaria para el periodo 2025-2027. La profesión prácticamente no se encuentra referenciada en el documento, salvo cuando se comenta la necesidad de incrementar la colaboración entre los equipos de estos servicios y los de salud mental, integrados por "psiquiatras, profesionales de Psicología, Enfermería y Trabajo Social", según indica el escrito.

Es más, en la actuación relacionada con la potenciación de los equipos del primer nivel asistencial, donde se pretende definir las competencias de cada profesión, no se llega a mencionar a los egresados de Psicología. Por el contrario, aparecen médicos de Familia, pediatras, enfermeras especialistas y generales, farmacéuticos, odontólogos, logopedas, ópticos y optometristas, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, técnicos de cuidados auxiliares de Enfermería (TCAE), nutricionistas y trabajadores sociales. "No se entiende que no nos hayan incluido", ha lamentado el vicepresidente del COP, Fernando Chacón.

"La red de centros de salud mental están saturados y las listas de espera superan los seis meses", ha revelado Chacón

Bajo el punto de vista del representante de este gremio, la presencia del psicólogo es fundamental, especialmente ante el aumento de pacientes con problemas de salud mental. "La atención de estas patologías se focaliza en la red de centros especializados en este ámbito. Sin embargo, estos también están saturados. Las listas de espera pueden superar los seis meses", ha resaltado a Redacción Médica. En la actualidad, buena parte de los afectados son enviados a este sector de la infraestructura sanitaria por parte de los facultativos de Atención Primaria. Situación que genera sobrecarga en los profesionales que allí laboran, lo que hace que en determinadas ocasiones abandonen sus puestos de trabajo y se dirijan a la sanidad privada.

El profesional de Psicología en un centro sanitario actuaría como sistema de cribado. De esta, se derivarían los casos más complejos a los centros de salud mental, mientas que los más leves se resolverían en Atención Primaria. Chacón también aboga por el establecimiento de esta figura en centros sociales y educativos, ya que determinados escenarios podrían solventarse sin llegar a las consultas del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Soluciones ante la falta de psicólogos

La primera respuesta ante la falta de este perfil profesional pasa por el refuerzo de los procesos de Formación Sanitaria Especializada (FSE). Así, el COP aboga por elevar el número de plazas PIR, situado en 274 para la convocatoria 2024/2025. "Se trata de una solución a medio plazo que podría garantizar la llegada de más profesionales", ha destacado el vicepresidente del organismo. Eso sí, las comunidades autónomas también tienen que actuar y crear la categoría profesional requerida para la contratación de estos profesionales.

Por otro lado, las condiciones laborales del universo de salud mental deben mejorar. Tanto a nivel salarial como de horario y número de pacientes a atender a lo largo de la jornada. Una petición aplicada a Psicología Clínica, pero también a Psiquiatría y Enfermería de Salud Mental. De esta forma, se aminoraría la fuga de profesionales hacia hospitales y centros privados.

"Acercar la psicoterapia a la población ayuda a reducir el consumo de fármacos, las visitas al médico y la efectividad del tratamiento", ha señalado Chacón

El número de psicólogos clínicos apenas supera el millar en el SNS. Motivo por el que algunas comunidades autónomas han optado por la contratación de titulados universitarios sin la especialidad, pero con un máster en la vertiente de Psicología centrada en la prevención, investigación y diagnóstico de patologías de salud mental. Es el caso de Canarias, Cataluña o Navarra, donde se ofertan contratos a este tipo de profesionales. "Se trata de una solución a corto plazo ante la necesidad imperante, pero también puede provocar que se reduzcan las vacantes para la especialidad", ha explicado Chacón.

El vicepresidente de la corporación colegial ha remarcado que el psicólogo en Atención Primaria no solo perfecciona la asistencia al paciente, sino la sostenibilidad del propio SNS. "Acercar la psicoterapia a la población ayuda a reducir el consumo de fármacos, las visitas al médico y aumentar la efectividad del tratamiento", ha enumerado Chacón. Un ahorro que el COP cifra en menos de 200 millones de euros al año.