El
cáncer de pulmón, pese a los avances logrados por la
Oncología en los últimos años, sigue siendo la
principal causa de muerte por cáncer en todo el mundo. El 50 por ciento de los casos de
adenocarcinoma de pulmón presenta
mutaciones en el gen supresor de
tumores p53 asociadas a un mal pronóstico de la enfermedad. La forma en que este gen suprime el desarrollo de este tipo de tumores sigue siendo un misterio, y una investigación de la
Universidad de Standford Alyssa Kaiser, en colaboración con el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (
VHIO), defiende la hipótesis de que controlar la diferenciación celular podría ser una nueva y prometedora estrategia terapéutica contra el cáncer de pulmón.
El gen tumoral p53 es definido en
Redacción Médica por
José Antonio Seoane, jefe del Grupo de Biología Computacional del Cáncer, como “el guardián del genoma, ya que está involucrando en un montón de procesos. Este gen impide que una célula llegue a convertirse en
cancerosa, controlando su reparación del ADN”. Las
alteraciones o mutaciones en estos genes desactivan estos mecanismos de control, provocando una proliferación descontrolada de las células que puede acabar en el desarrollo de tumores.
Los ratones con mutaciones generaban tumores más pequeños
En el estudio, publicado en la revista científica
Nature, los investigadores han descubierto que p53 regula la
diferenciación de las células pulmonares AT1 y AT2 en el momento que adquieren las características que la convierten en una célula pulmonar normal. En la investigación, Seoane recuerda que “se cogieron unos
ratones normales, en otros
se les eliminó este gen y en otros se
indujeron mutaciones para que el gen aumentase más su función. Los ratones sin el gen
generaron más tumores en el pulmón, mientras que a los que potenciaron el gen
los tumores eran muy pequeños”.
"Los ratones sin el gen generaron más tumores, mientras que a los que lo potenciaron los tumores eran muy pequeños"
|
Tras los
resultados para frenar al cáncer de pulmón y después de comprobar que la trascripción y la epigenética de los tumores, que variaban según el
nivel de intensidad del gen, el especialista destaca que “cuando este se pierde, la transición de AT2 a AT1 se queda permanentemente en un estado de transición, ya que la célula
gana plasticidad y se vuelve más agresiva, siendo capaz de esquivar mecanismos para evitar que se origine un tumor”.
Fármacos epigenéticos, vía para controlar la diferenciación celular
Pese a que la investigación sigue siendo muy inicial, la opción más viable que contempla el investigador es provocar que este estado de transición finalice, apostando por
controlar la diferenciación celular a través de “fármacos epigenéticos. Este abordaje ya se ha utilizado en leucemia, pero estos medicamentos no se pueden aplicar contra el cáncer de pulmón. Se deben buscar mecanismos para hacer madurar a los pulmones y ver si son efectivos contra el cáncer”.
"Se deben buscar mecanismos para hacer madurar a los pulmones y ver si son efectivos contra el cáncer"
|
Los autores del estudio concluyen que “en conjunto, estos hallazgos revelan los
mecanismos de supresión de adenocarcinoma pulmonar mediada por p53, en los que este gen supresor de tumores gobierna la diferenciación de las células del alveolo pulmonar y sugieren que promover la diferenciación de las células AT1 podría imitar funciones críticas de p53 y proporcionar una prometedora estrategia terapéutica para pacientes con adenocarcinoma de pulmón”.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.