Recientemente un estudio realizado por el grupo de Investigación Traslacional en
Cáncer en la Infancia y la Adolescencia, junto con el grupo de
Investigación Biomédica en Urología del
Hospital Vall d’Hebron, demostró la eficacia del
fármaco 4SC-205 contra el
neuroblastoma, inhibiendo la
proteína KIF11. Esta patología se trata de un tipo de
tumor pediátrico muy agresivo, siendo la
primera causa de muerte en niños por enfermedad. Aunque se han logrado grandes resultados, los investigadores ven difícil poder iniciar un ensayo clínico con el nuevo fármaco.
El
4SC-205 ha funcionado correctamente y tal y como analiza en
Redacción Médica el investigador del grupo de Investigación Traslacional en Cáncer en la Infancia y la Adolescencia del
Vall d’Hebron Recerca,
Marc Masanas, "
ha sido testado en líneas celulares y ratones a partir de
modelos derivados de
pacientes de la Vall d’Hebrón. Inyectábamos en la glándula suprarrenal el mismo tumor que sufría el paciente. Se trata de un tumor agresivo que no respondía a
tratamientos, y con este fármaco los efectos casi
desaparecieron por completo”.
El investigador, por otra parte, explica una
conclusión vital de las investigaciones y que no llegó a plasmarse en el estudio publicado por
Clinical and Translational Medicine: “La combinación entre
inhibidores quimioterapéuticos con el
4SC-205 reduce aún más el crecimiento de las
metástasis in vivo en comparación con
in vitro. En el estudio publicado solamente nos referimos a la eficacia del fármaco a nivel in vitro. Se trata de
resultados relevantes, ya que si podemos eliminar las células metastásicas evitaríamos que los
pacientes recayeran. Con el neuroblastoma se sospecha que quedan células metastáticas en la
médula ósea y la
combinación de fármacos inhibe muy bien el crecimiento de las metástasis en estos órganos”.
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"La metástasis se reduce más en modelos in vivo en comparación con in vitro"
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Pese a conseguir resultados enormemente positivos en la investigación (eficaz atacando a metástasis en
hígado y
médula ósea, dos de los órganos más afectados por la metástasis en neuroblastoma), Masanas afirma que “hemos de ver si es factible
realizar un ensayo clínico. Se trata de un tumor con una
incidencia muy baja, por lo que las empresas farmacéuticas ven difícil invertir dinero en este campo no les sale rentable fabricar un medicamento”.
Los investigadores, en busca de fuentes de financiación
A lo largo del año acaban viendo la luz una gran cantidad de proyectos, y Masanas afirma que es “el laboratorio que busca
aplicar en aquellos proyectos con opción a avanzar. Este fármaco ha sacado muy buenos resultados. Otro inhibidor para tener en cuenta es uno producido por
Pfizer, que hace el mismo efecto contra la proteína
KIF11. Unos investigadores de Suecia sacaron un artículo
similar al nuestro. Se trata, pues, de dos estudios con
fármacos diferentes y que logran conclusones similares. Sería interesante tenerlo en cuenta de cara al futuro, ya sea con nuestro fármaco o con el inhibidor de Pfizer”.
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"El laboratorio busca aplicar en aquellos proyectos con opción a avanzar"
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La empresa que ha financiado el proyecto,
4SC, cuenta con poca capacidad para poder invertir y realizar un ensayo clínico en cánceres pediátricos. Debido a ello, el grupo de investigadores ya ha iniciado la búsqueda para encontrar
otras fuentes. Así pues, Masanas explica que “no se ha hablado con la
Agencia Española del Medicmaento (Aemps). El inhibidor se ha probado en tumores sólidos en adulto en Europa y están ahora haciendo en China un ensayo clínico para este tipo de tumores y
ampliar el número de pacientes. Veremos qué resultados se logran y a partir de aquí, analizaremos posibles
fuentes de financiación con el neuroblastoma”.
Equipos multidisciplinares, la semilla del éxito
Todo el trabajo realizado por los diferentes especialistas involucrados no hubiera sido posible sin la formación de un
equipo multidisciplinar. Masanas recuerda que “hemos trabajado con
oncólogos en relación con las posibles
combinaciones de fármacos para lograr un inhibidor nuevo, mientras que el trabajo de los patólogos también ha sido de
vital importancia a la hora de analizar los
distintos tumores que hemos encontrado”.
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