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La transmisión Covid "aérea" exige reevaluar toda enfermedad respiratoria

Investigadores del SARS-CoV-2 confirman que los aerosoles tienen un papel mucho mayor del que se reconocía

Chia C. Wang, principal autora del estudio y directora del Centro de Investigación Científica de Aerosoles de la Universidad Nacional Sun Yat-sen (Taiwán).

27 ago 2021. 11.30H
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El final del Covid-19 está cerca pero todavía no ha llegado. Además de la vacunación, es necesario seguir estudiando este virus para elaborar estrategias que frenen su propagación. Uno de los aspectos que más preocupa es su transmisión aérea, que ha tenido que renovarse debido a la visión tradicional de las vías de transmisión de los virus respiratorios.

"Tradicionalmente, se pensaba que los patógenos respiratorios se propagaban entre las personas a través de las gotas grandes producidas en la tos y por el contacto con superficies contaminadas (fómites). Sin embargo, se sabe que varios patógenos respiratorios se propagan a través de pequeños aerosoles respiratorios, que pueden flotar y viajar en corrientes de aire, infectando a las personas que los inhalan a distancias cortas y largas de la persona infectada", explican los autores del estudio 'Transmisión aérea de virus respiratorios' publicado este viernes en la revista Science.

Los objetivos principales de este análisis son reevaluar la vía de transmisión de aerosoles para todas las enfermedades infecciosas respiratorias y elaborar unas medidas de mitigación más concretas para frenar el Covid-19.

Transmisión de los virus respiratorios


Los modos de transmisión principales de los patógenos respiratorios son la exposición a las gotitas producidas en las toses y estornudos de personas infectadas o el contacto con superficies contaminadas con estas gotitas (llamadas fómites). Esto se conoce como la inhalación de aerosoles infecciosos de menos de 5 micrometros (μm) y principalmente a una distancia de menos de 1 a 2 metros del individuo infectado.

Sin embargo, esta transmisión no explica la gran propagación del SARS-CoV-2 y la diferencia entre los contagios generados en ambientes interiores y exteriores. Gracias a las numerosas investigaciones, se ha demostrado que las gotitas respiratorias y los aerosoles se generan en diversas actividades respiratorias y pueden ser más pequeños e infectar igualmente. "La mayoría de los aerosoles exhalados son menores de 5 μm, y una gran fracción es menor de 1 μm para la mayoría de las actividades respiratorias, incluidas las producidas durante la respiración, el habla y la tos", indican en esta investigación.

En este sentido, señalan que históricamente se había utilizado la medida de 5 μm para distinguir aerosoles de gotitas, pero que "la distinción de tamaño entre aerosoles y gotitas debe ser de 100 μm, que representa el tamaño de partícula más grande que puede permanecer suspendido en aire inmóvil durante más de 5 segundos desde una altura de 1 metro y medio". Asimismo, en el transporte de aerosoles cargados de virus también influyen las propiedades fisicoquímicas de los aerosoles mismos y factores ambientales como son: la humedad, la temperatura, la ventilación, el flujo de aire y la radiación ultravioleta.

Por su tamaño, los aerosoles tienden a depositarse en diferentes lugares del tracto respiratorio. Los más grandes se colocan en las vías respiratorias superiores y los más pequeños pueden penetrar hasta la región alveolar de los pulmones.

Los aerosoles, causantes de la mayor propagación


Por lo tanto, se ha descubierto que en el caso del Covid-19, la transmisión por fómites es menos eficiente y las gotas solo producen el contagio cuando los individuos están a menos de 0,2 m unos de otros cuando hablan.

"Aunque los individuos infectados pueden producir tanto aerosoles como gotitas durante las actividades espiratorias, las gotitas caen rápidamente al suelo o superficies en segundos, dejando un enriquecimiento de aerosoles sobre las gotitas", afirman los investigadores del estudio. Por ello, es muy probable que la vía aérea contribuya a la propagación del Covid-19 y de otros virus respiratorios, que se pensaban que solo se contagian a través de las gotitas.

De hecho, tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han reconocido de forma oficial que la inhalación de aerosoles cargados de virus es el "modo de transmisión principal en la propagación del Covid-19 tanto a corto como a largo plazo en 2021".

Por último, como conclusión, los autores del análisis consideran que se deben implementar medidas de precaución adicionales para frenar la transmisión por aerosoles. Concretamente, opinan que hay que prestar especial atención a la ventilación, los flujos de aire, la filtración de aire, la desinfección UV y el ajuste de la mascarilla. Todo ello podría poner fin a la pandemia y prevenir futuros brotes.

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