El
Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes) ha elaborado un informe en relación al
brote de botulismo asociado al consumo de
tortilla de patatas envasada, para el que ya hay cuatro casos confirmados por laboratorio con fecha de inicio de síntomas entre el 24 de junio y el 4 de julio y 3 casos probables (con clínica compatible y vínculo epidemiológico). Tal y como describe el documento, el tratamiento específico de esta enfermedad consiste en la administración intravenosa de
antitoxina botulínica tan pronto como sea posible, "preferiblemente dentro de las primeras 48 horas". Además, según afirma el organismo dependiente del
Ministerio de Sanidad, "en España está disponible y existe una reserva suficiente".
En los siete casos notificados, explica el Ccaes, había antecedentes de haber consumido
tortilla de patata precocinada, envasada y adquirida en diferentes supermercados de varias CCAA bajo diferentes marcas. Según la información facilitada desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (
Aesan), al menos en tres de los
casos confirmados de botulismo y en uno de los probables la empresa que elabora las tortillas es la misma.
El
informe sobre botulismo elaborado por Sanidad también destaca que tres personas (dos casos confirmados y uno probable) han requerido o tratamiento en una Unidad de Cuidados Intensivos aunque por el momento no ha habido
ningún fallecido entre los casos asociados a este brote de botulismo.
Botulismo transmitido por alimentos
El botulismo trasmitido por alimentos, una de sus tres formas clínicas, "resulta de la
ingestión de toxina preformada en alimentos contaminados por Clostridium productor de toxina botulínica", explica Sanidad. Casi todos los casos esporádicos y brotes en nuestro medio tienen relación con
productos alimentarios preparados o conservados por métodos que no destruyen las esporas y permiten la formación de toxina, habitualmente conservas caseras.
Los
síntomas del botulismo se inician tras un período de incubación habitual de entre 12 y 36 horas, aunque a veces puede llegar a ser de varios días y hasta una semana tras la ingesta del alimento, en este caso la tortilla de patatas precocinada. "Cuanto más corto es el periodo de incubación más grave es la enfermedad y mayor la letalidad", advierte el informe.
Aunque la persona puede presentar síntomas gastrointestinales como
náuseas, vómitos o diarrea, los signos iniciales son "una marcada astenia, debilidad y vértigo seguidos de visión borrosa, boca seca, dificultad para tragar y para hablar como consecuencia de la afectación por la toxina de los pares craneales. La parálisis de los músculos respiratorios puede requerir la instauración de ventilación mecánica", concisa el Ccaes. No obstante,
la mayoría de los casos se recuperan si son diagnosticados y tratados precozmente.
Tratamiento específico del botulismo
Para garantizar un rendimiento diagnóstico, Sanidad señala que lo más adecuado y necesario es que las muestras se obtengan en los primeros días tras el inicio de síntomas. "El
tratamiento específico del botulismo consiste en la administración intravenosa de antitoxina botulínica tan pronto como sea posible, y preferiblemente dentro de las primeras 48 horas. La
antitoxina equina heptavalente (BAT) está disponible en España y su uso está autorizado para todas las franjas de edad, incluyendo menores de un año", detalla el Ccaes.
Según confirma, en nuestro país "existe una reserva suficiente" de esta antitoxina botulínica y "los Servicios de Farmacia Hospitalaria están en contacto con la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps) para garantizar la disponibilidad de forma permanente". El
botulismo es una enfermedad de declaración obligatoria en España, por eso es urgente que las CCAA comuniquen cualquier caso ligado al brote relacionado las tortillas envasadas.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.