El Ministerio de Sanidad de
Mónica García comienza a dar los primeros pasos para acabar con la falta de profesionales en zonas de difícil cobertura. La primera propuesta que ha emanado en la primera
Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud de esta nueva etapa es la de armonizar un contrato de dos años para los MIR que acaben su residencia, con el objetivo de mantener a estos profesionales en el área donde se han formado y paliar el
déficit de profesionales que sufre el Sistema Nacional de Salud.
Según explican fuentes autonómicas presentes en la reunión celebrada este lunes, aunque la propuesta aún es muy embrionaria, varias regiones valoran de forma positiva estos contratos de dos años tras acabar la residencia, dado que en varias comunidades autónomas ya se viene aplicando esta estrategia incluso con contrato de hasta tres años, como es el caso de
Castilla-La Mancha o Castilla y León.
Ahora es el
Ministerio de Sanidad el que tendrá que negociar la propuesta con todas las comunidades autónomas, las cuales mantienen las competencias en materia de contratación sanitaria y son ellas las que deben asumir la afiliación de ese personal extra. Aun así, a priori, el plan se ha valorado con buenos ojos y se prevé que se siga trabajando en él durante los próximos meses, presentando incluso una propuesta formal en
el próximo pleno monográfico del Consejo Interterritorial a la Atención Primaria acordado en la comisión de hoy.
Varias CCAA ofrecen a los MIR contratos de tres años
Algunos casos de éxito que ya se aplican en varias regiones incluyen el dar
un contrato estable de tres años a todos los residentes que acaban su formación. Es el caso del
Gobierno de Castilla-La Mancha, que en febrero de este año amplió esta medida tanto para sus residentes en formación como aquellos que finalizaran en otro servicio de salud del país. Otras regiones, como Galicia, también optan por este contrato de larga duración pero para retener a especialistas en Medicina de Familia en zonas de difícil cobertura. Las comunidades solo pueden ofrecer hasta un máximo de tres años, según el
ámbito legal actual.
Dichas fuentes reconocen lo “positivo” de la medida, aunque reconocen que aún es pronto para que esta pueda ser efectiva a corto plazo debido a las restricciones que impone la tasa de reposición en los servicios de salud.
También se tendrá que negociar si esta medida solo irá destinada a especialidades deficitarias o se abrirá el abanico para todos los residentes.
El rumbo de esta decisión estará salpicado por el resultado de la identificación de los puestos de difícil cobertura y la aportación de incentivos económicos y no económicos para la atracción y retención en dichos puestos en el que ya trabaja el Ministerio de Sanidad.
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