El
Ministerio de Sanidad ha lanzado un concurso público para desarrollar
aplicaciones digitales para impulsar el ámbito de la Salud Pública. Con un
contrato de 1.275.648 euros, la cartera ministerial ha lanzado este concurso que busca desarrollar servicios en cuatro ámbitos: consultoría, desarrollo de software, Internet y apoyo.
El contrato tendrá
un plazo de ejecución de 24 meses desde el día 1 de diciembre de 2023, “o desde la fecha de formalización del contrato si ésta fuera posterior” y no se contemplan prórrogas. Se contempla que el proyecto necesitará un jefe de proyecto, un analista, un analista programador y cuatro programadores. El casi millón y medio de euros destinado al proyecto se ha estimado usando “los actuales
precios del mercado para servicios similares y la experiencia de la unidad proponente en otros contratos de naturaleza similar”. Se espera que en cada año del proyecto, 2024 y 2025, se ejecutarán 643.139,20 euros del presupuesto.
Para la elección de la empresa esta debe, por un lado, demostrar
solvencia económica y financiera. Esta debe ser acreditada mediante el volumen anual de negocios de la empresa en el ámbito al que se refiera el objeto del contrato, referido al mejor ejercicio dentro de los tres últimos años disponibles. Por otro lado, deben demostrar
solvencia técnica y profesional, mostrando una relación de los principales servicios o trabajos realizados en los últimos tres años en el ámbito funcional del contrato.
El órgano de contratación es la
Secretaría General de Salud Digital, Información e Innovación del SNS. El órgano responsable de la contabilidad pública es la Intervención Delegada del Ministerio de Sanidad y, por último, el órgano destinatario es la Subdirección General de Servicios Digitales de Salud.
Objetivos de la nueva fase de digitalización
El objetivo final es el desarrollo de servicios públicos digitales en el sector salud. Desde Sanidad comentan que estos deben estar “en línea con el impacto directo en las
estrategias de vigilancia, promoción y prevención, de prestación de asistencia sanitaria y de rehabilitación y reinserción social tras la enfermedad”. Además, el proyecto busca el impulso de la interoperabilidad de la información sanitaria, en el ámbito nacional e internacional, al servicio tanto de la
atención sanitaria directa como de la toma de decisiones por las autoridades sanitarias, así como para el aprovechamiento secundario de los datos.
Por otro lado, el proyecto reforzará la analítica de datos y de la
explotación de la información para la inteligencia del negocio del Sistema Nacional de Salud (SNS). Comentan que esto contribuirá tanto a optimizar la toma de decisiones clínicas como las capacidades de planificación y anticipación al riesgo, la mayor efectividad de los servicios de vigilancia y el impulso de la investigación, básica y aplicada.
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