El
Ministerio de Sanidad ha optado por externalizar el desarrollo de las aplicaciones digitales que va a ir incorporando al
Sistema Nacional de Salud para garantizar sistemas como el
Nodo central y la interoperabilidad de
tarjetas sanitarias y recetas, entre otros aspectos.
Según se refiere en la documentación que justifica la publicación de dicho concurso, “actualmente, en torno
al 90% del personal con formación en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) de la Subdirección General de Servicios Digitales de Salud
es personal externo, por lo que, dada la escasez de personal interno, se hace necesario realizar la contratación de la prestación de los servicios de desarrollo, a fin de poder dar respuesta a las
necesidades del Sistema Nacional de Salud”.
Una situación en la que se incide en otro de los documentos del concurso público donde Noemí Cívicos, subdirectora general de Servicios Digitales de Salud, matiza que
“dada la escasez de medios humanos de que dispone la Subdirección, se hace imposible que el ministerio asuma los trabajos objeto de este expediente de contratación de forma interna con medios propios”. A lo que añade: “Dada la naturaleza de los trabajos objeto de este expediente se opta por externalizar estas tareas,
que no son inherentes a la condición de servidor público y cuyo nivel de conocimiento es variable en el tiempo, en función de las necesidades de la organización, destinando los recursos dotados en la relación de puestos de trabajo de la Subdirección General a aquellas tareas propias e inherentes a la condición de empleados públicos que no pueden externalizarse”.
El contrato, de
dos años de duración y que está
en fase de evaluación desde que el pasado 17 de agosto cerrara el plazo para la presentación de ofertas, tiene un valor estimado de más de 26 millones de euros, si bien el presupuesto base de licitación con impuestos
asciende a 14.459.984 euros.
Verificación de medicamentos y datos de hospitalización
Con él, el Ministerio de Sanidad quiere poner en marcha
“la prestación de los servicios de desarrollo de nuevas funcionalidades, desarrollo evolutivo, desarrollo correctivo, tareas de integración con entidades externas y soporte a las incidencias, de las aplicaciones informáticas del ámbito del Sistema Nacional de Salud, mediante un modelo de prestación comprometido y basado en Acuerdos de Nivel de Servicio”, detalla la documentación.
Esto se traduce en un concurso
dividido en cinco lotes que acaparan amplias competencias en la digitalización de la sanidad española:
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Lote 1. Nodo central y servicios de interoperabilidad del Sistema Nacional de Salud.
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Lote 2. Fondos de Compensación Interterritorial, Verificación de Medicamentos y Conjunto Mínimo Básico de Datos de Hospitalización del SNS (CMBD).
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Lote 3. Sistemas de información sanitarios.
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Lote 4: Aplicaciones complementarias del Sistema Nacional de Salud.
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Lote 5. Gestión, seguimiento y control.
Asimismo, Sanidad ha parcelado el acceso de las empresas a los distintos lotes. Por ejemplo, los 1, 2, 3 y 4 han sido calificados de
“Desarrollo de Sistemas de Información” y tendrán como objetivo poner en marcha los trabajos antes mencionados. Sin embargo, el lote 5 está enfocado a la “gestión, seguimiento y control del contrato” y las empresas que se presenten a él
no podrán hacerlo con el resto de lotes.
En cuanto a
la inversión por cada lote, Sanidad la ha distribuido de la siguiente forma (IVA incluido):
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Lote 1: 3.313.657,60 euros
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Lote 2: 2.461.817,60 euros.
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Lote 3: 4.165.497,60 euros.
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Lote 4: 3.718.281,60 euros.
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Lote 5: 800.729,60 euros.
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