El camino hacia la regulación del
cannabis medicinal en España comenzó en junio de 2022, cuando el Congreso de los Diputados, con
Carolina Darias al frente del
Ministerio de Sanidad, creó una subcomisión específica en el seno de la Comisión de Sanidad y Consumo. De ese trabajo surgió el mandato a la
Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios para elaborar un borrador de
Real Decreto que permitiera legalizar su uso terapéutico. El proyecto salió a consulta pública en 2024 y, el pasado mes de octubre, el
Consejo de Ministros aprobó la regulación de las fórmulas magistrales tipificadas elaboradas a partir de preparados estandarizados de cannabis.
En paralelo, la delegada del Gobierno para el
Plan Nacional sobre Drogas, Xisca Sureda, señaló que no existe un “no” rotundo a una eventual regulación del uso recreativo. Ante esta afirmación, el
Partido Popular ha preguntado al Ejecutivo, a través de una iniciativa parlamentaria, por sus planes en esta materia. El Gobierno, sin embargo, ha negado que en la actualidad se esté trabajando con ese objetivo.
Regulación del cannabis en España
En su
respuesta, el Ejecutivo ha reiterado que, pese a la aprobación del cannabis para uso medicinal, descarta por ahora avanzar hacia una regulación con fines recreativos o su consideración como sustancia de uso libre. En este contexto,
Beatriz Salazar, coordinadora del
Grupo de Trabajo de Neuropsiquiatría de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), analizó en este periódico los retos del nuevo escenario sanitario, defendiendo una autorización bajo controles estrictos para evitar riesgos tóxicos asociados al mercado ilegal. Además, calificó esta regulación como una “oportunidad terapéutica” para pacientes sin alternativas eficaces, aunque subrayó la necesidad de priorizar fármacos con evidencia sólida y reservar el cannabis como opción de tercera o cuarta línea.
Por su parte, el
Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones (OEDA) publicó en 2022 una monografía sobre el cannabis, actualizada en 2025. Además, la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas (Dgpnsd) actualiza de forma periódica la información sobre cambios regulatorios, usos terapéuticos y efectos adversos.
Otras medidas de control de drogas en España
En la misma respuesta, el Gobierno ha detallado un conjunto de medidas fiscales, sanitarias y sociales para reforzar e
l control de las sustancias adictivas. Entre ellas destaca el aumento de los impuestos sobre el tabaco y las bebidas alcohólicas, así como la creación de
un nuevo tributo sobre los líquidos para
cigarrillos electrónicos, bolsas de nicotina y otros productos de vapeo, aplicable en todo el territorio salvo en Canarias, Ceuta y Melilla.
En el ámbito sanitario, el Ejecutivo subraya el refuerzo de la
vigilancia sobre el consumo de analgésicos opioides, a través de encuestas oficiales y sistemas de información, así como el impulso al Sistema Español de Alerta Temprana para detectar sustancias como el fentanilo. La estrategia incorpora, además, una perspectiva de género, con medidas para mejorar la atención a las mujeres y abordar la relación entre consumo de sustancias y violencia machista. Todo ello se enmarca en la
Estrategia Nacional sobre Adicciones, basada en la evidencia científica y en un enfoque libre de discriminación y estigmatización.
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