Sobre los cimientos del
Plan de Acción de Atención Primaria 2022-23 construirán el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas la hoja de ruta para el próximo bienio. Según ha informado el Gobierno, el departamento de
Mónica García ya ha comenzado a esbozar la estrategia, que, tal y como avanzó la ministra en el último Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS), pondrá el foco sobre la situación laboral de los profesionales y será fruto del
"consenso" con las comunidades autónomas.
En una respuesta parlamentaria registrada en el Congreso de los Diputados, el Ejecutivo recuerda que el Ministerio de Sanidad ha llevado a cabo una evaluación del grado de cumplimiento del
actual Plan de Acción de Atención Primaria y Comunitaria, cuyos resultados fueron presentados en el pleno monográfico del
Consejo Interterritorial celebrado el pasado febrero.
Según informó la propia García, hasta esa fecha se había completado en torno a un 60 por ciento de las medidas del antiguo plan, aprobado en 2021 y al que el Gobierno destinó
más de 600 millones de euros (repartidos entre las comunidades autónomas con carácter finalista.
Plazas de difícil cobertura en sanidad
En
respuesta sobre el nuevo Plan de Acción de Primaria, el Gobierno central avanza que Sanidad está tomando “como punto de partida” esa evaluación del proyecto de 2022-23. “Se está trabajando en una metodología de consenso para identificar próximas
acciones a realizar en el año 2024 y posteriores dándole continuidad”, indica.
El Ministerio de Sanidad viene haciendo hincapié en la necesidad de subsanar los problemas de cobertura de plazas en la Atención Primaria, que pasan, sobre todo, por “revisar los
criterios de acreditación de unidades docentes” y “mejorar las condicionales laborales, competencias y roles” de los trabajadores.
“Necesitamos que los profesionales de la Atención Primaria tengan tiempo para que sus consultas sean largas y pausadas. Para que puedan hacer un seguimiento continuado, un abordaje comunitario. Sin tiempo no hay profesionales, y
sin profesionales no hay Atención Primaria”, reivindicó García.
Registro de profesionales y más plazas MIR
En este sentido, Gobierno central y comunidades autónomas han acercado posturas sobre la necesidad de “mejorar las
condiciones laborales de los profesionales sanitarios, incluidas las competencias, los roles y la desburocratización”.
También acordaron una revisión de los criterios de acreditación de plazas MIR de Familia “respectando siempre la calidad de la formación de los profesionales”, así como
completar el Registro Estatal de Profesionales para tener un “mapa completo” de los puestos con mayor dificultad de cobertura.
Sobre este registro, que lleva ‘en cocina’ desde hace una década, Sanidad avanzó que está
completo al 70 por ciento, aunque precisa de un último empuje “en algunas comunidades autónomas”.
Por su parte, las consejerías de Salud autonómicas vienen reclamando impulsos a este registro para
“orientar” las necesidades de formación en sanidad, especialmente en el primer nivel asistencial, así como para evitar el intrusismo y dar seguridad jurídica a los propios trabajadores.
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