El
Ministerio de Sanidad continúa con la tramitación de la orden destinada a permitir la donación de órganos entre
pacientes con VIH (virus de inmunodeficiencia humana), proyecto dirigido no solo a aumentar la accesibilidad de estas personas a la red y, por tanto, de contribuir a que tengan vidas “largas y saludables”, sino también a acabar con la
“estigmatización y la exclusión social” que sufren. En el documento de audiencia pública que se ha hecho público tras recabar los posicionamientos de sociedades y particulares se indica que esta iniciativa no tendrá “ningún impacto presupuestario”, y se recuerda que esta regulación “
no invade competencias de las comunidades autónomas”, pese a que “han sido consultadas”. En este sentido, subraya que este derecho estará blindado dado que se dicta “al amparo de la
competencia exclusiva del Estado”.
Cuatro son los objetivos recogidos en el resumen ejecutivo de esta norma que derogaría la
orden de 1987 en materia de obtención, extracción, trasplante, injerto o implantación de órganos humanos. El primero de ellos se refiere a la necesidad de trasladar el requisito de
cribado del VIH para trasplante “a las directrices técnicas adoptadas por la Comisión Permanente de Trasplantes del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS)”, como cualquier enfermedad “potencialmente transmisible al receptor”.
De forma paralela, se persigue “aumentar la adhesión normativa a los actos legislativos de la Unión Europea”, lo que conduce a “permitir la donación y el trasplante de órganos
entre personas infectadas con el VIH en línea con la
actividad de varios países del entorno”. Finalmente, se persigue “contribuir a la desaparición de la estigmatización” de las personas aquejadas por este virus.
Sanidad detalla que en España, hasta la fecha, las
personas infectadas por el VIH que han requerido de un trasplante han recibido órganos de donantes libres de la infección. La orden de 24 de junio de 1987 impide que estas personas puedan recurrir a la opción de la donación, “limitándoles esta forma de contribución a la sociedad”. Por otra parte, el artículo quinto de la citada norma impide el trasplante a los receptores con infección por el VIH con
órganos libres de la infección procedentes del extranjero dado que se exige la negatividad no solo en la prueba del donante sino también en la del receptor. “Esta redacción, que debe entenderse en el contexto de aquella época, puede considerarse discriminatoria en el momento actual”, apunta.
Añade el Ministerio que, durante los últimos años el colectivo de personas con VIH, sus organizaciones y los profesionales que les brindan asistencia sanitaria
“han contactado repetidamente con Sanidad y con la ONT, reivindicando la opción de la donación de órganos por parte de las personas con VIH, equiparándose en este sentido a otros individuos de nuestra sociedad”.
“En resumen, los excelentes resultados terapéuticos en pacientes con VIH, la existencia de directrices técnicas actualizadas que permiten
cribar y gestionar todos los patógenos necesarios, incluyendo el VIH, la posibilidad de iniciar la donación y el trasplante de órganos entre personas con infección por el VIH, con el efecto colateral de llegar a más personas en lista de espera y, por último, la alineación con la normativa europea”.
Datos de trasplantes a personas con VIH en España
La información proporcionada por los registros de trasplante muestra el número de personas con infección por el VIH que han recibido un trasplante de algún órgano en España: 311 recibieron un
riñón (entre 2021 y 2023), 510 un
hígado (1991-2023), 10 un
corazón (2007-2024), 11 un
trasplante pulmonar (2013-2024) y 1 un
trasplante combinado de páncreas-riñón en 2024.
Todos ellos se trasplantaron con órganos libres de VIH. “Si algunos de ellos se hubieran trasplantado con órganos infectados con el VIH, los órganos libres de infección se habrían destinado a pacientes seronegativos en la lista de espera de trasplante. Es preciso tener en cuenta que el estado en lista de espera no es estable, ya que, mientras esperan el órgano,
los pacientes se deterioran y muchos fallecen”, apunta Sanidad.
Dudas y competencias en materia de trasplantes
Durante el trámite de consulta pública, el Ministerio de Sanidad recibió un total de
nueve aportaciones de particulares (seis de ellos, facultativos), de las cuales ocho fueron “favorables”. “Una mostraba dudas que se aclararon en respuesta y volvió a escribir manifestando su apoyo a la iniciativa -detalla el documento-. La última manifiesta
preocupación por posibles riesgos asociados, no detallando a qué riesgos concretos se refiere”.
También se dio audiencia a los sectores afectados y se consultó a las comunidades autónomas y las ciudades de Ceuta y Melilla. En cualquier caso, índice en que el proyecto “se dicta al amparo de la competencia exclusiva del Estado”.
“En relación con esta competencia, el Tribunal Constitucional ha declarado que a través de las bases que corresponde establecer al Estado, se garantiza la existencia de una
regulación uniforme y mínima y de vigencia en todo el todo el territorio español en las condiciones de acceso al sistema sanitario y se evita la introducción de
factores de desigualdad en la protección básica de la salud”, expone.
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