La necesidad de establecer una
'unificación virtual e interoperable' de los datos sanitarios que se garantice por igual a nivel nacional ha llevado al
Ministerio de Sanidad a lanzar una
consulta pública este lunes para la modificación del Real Decreto 183/2004, por el que se regula la tarjeta sanitaria individual. La norma pretende establecer los 'datos básicos comunes y especificaciones técnicas' de la tarjeta
tanto en soporte físico como en virtual, siendo
válida en todo el Sistema Nacional de Salud (SNS) y permitiendo la coexistencia de ambos soportes.
"Con la nueva norma, se pretende
adaptar este Real Decreto a los avances de la tecnología, posibilitando que las autoridades sanitarias competentes emitan la
tarjeta sanitaria individual también en soporte virtual y que esta sea interoperable en el conjunto del SNS, pudiendo coexistir el soporte físico y virtual. Para ello se definen las especificaciones técnicas de la tarjeta sanitaria virtual, la imagen de la misma y la estructura de los datos del código QR", señala el documento de Sanidad.
La
consulta pública previa establece como fecha límite el 6 de noviembre. Hasta entonces, los ciudadanos, organizaciones y asociaciones que así lo consideren, pueden hacer llegar sus opiniones sobre los aspectos planteados acerca de esta unificación de la tarjeta sanitaria virtual al buzón de correo electrónico seciis@sanidad.gob.es.
Tarjeta sanitaria útil en todas las autonomías
El propio Ministerio especifica que
"no existen otras alternativas para la modificación". Por ello, la alternativa a no proceder a regular "de forma que se garantice la interoperabilidad de la tarjeta sanitaria individual en formato virtual", en base a unos datos básicos comunes, "conllevaría el
riesgo de que las distintas administraciones públicas sanitarias adopten su propia tarjeta sanitaria individual virtual", que podría ser no interoperable, por lo que esa tarjeta "solo serviría para la provisión de asistencia sanitaria o prestación farmacéutica" en la administración pública sanitaria emisora, en lugar de poder servir para el conjunto del Sistema Nacional de salud.
"La norma se hace necesaria para
garantizar la interoperabilidad de la tarjeta sanitaria individual tanto en soporte físico como virtual en el SNS, posibilitando que las autoridades sanitarias competentes emitan la tarjeta sanitaria individual en soporte virtual, en base a unos datos básicos comunes, y que todos los agentes implicados en la provisión de asistencia sanitaria o prestación farmacéutica adopten los medios técnicos que sean precisos para posibilitar la lectura de la misma independientemente de su formato", concretan.
Comprobar datos, "técnicamente posible" en todo el Estado
Estas tarjetas incluyen, de manera normalizada, los
datos básicos de identificación del titular de la tarjeta, del derecho que le asiste en relación con la prestación farmacéutica y del servicio de salud o entidad responsable de la asistencia sanitaria. Los dispositivos que las tarjetas incorporen para almacenar la información básica y las aplicaciones que la traten deberán permitir que la lectura y
comprobación de los datos sea "técnicamente posible en todo el territorio del Estado" y para todas las Administraciones públicas.
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