El recuento que cada año hace el
Ministerio de Sanidad para contabilizar los recursos e infraestructuras en el Sistema Nacional de Salud (SNS) ha revelado que la tendencia para reforzar las plazas disponibles en la sanidad continúa al alza. En el último año se han abierto
13 hospitales nuevos en el conjunto de las comunidades autónomas, lo que se ha traducido en
482 camas más para los pacientes, de acuerdo al catálogo nacional. Esta mejora también se ha trasladado hasta el volumen de
equipos de tecnología sanitaria que están operativos en los centros.
El informe del Gobierno ha cifrado el número total de hospitales desplegados en el país en
845, aunque la mejora no ha sido equitativa en todos los ámbitos. Mientras que los de tipo
general se han reforzado con 10 nuevos centros hasta alcanzar los 548, los que están dedicados a
ingresos de media y larga distancia han perdido dos infraestructuras hasta quedarse en 125. Los
centros especializados (49) o los de
salud mental y tratamiento de toxicomanías (92) no han sufrido variaciones en el último año.
Los datos también han permitido realizar una radiografía sobre el reparto de hospitales por todo el país.
Cataluña se ha mantenido como la región con más centros (203), aunque se ha dejado uno en comparación con 2021. Le sigue de cerca
Andalucía (135) que sí que ha ganado cuatro nuevas ubicaciones. Mientras que el pódium lo completa
Madrid (91), que dispone de uno más que en el anterior recuento.
La apertura de nuevos centros ha permitido engrosar el número de
camas hospitalarias disponibles hasta las 159.049, lo que representa 482 más que en el año anterior. Las estadísticas muestran que la tendencia al alza protagonizada en los últimos años se ha mantenido. El SNS ha alcanzado ya un volumen similar de plazas al de 2016, aunque t
odavía no ha recuperado los datos en comparación con el arranque de la década cuando el umbral superaba con holgura las 160.000.
La tecnología sanitaria en el SNS
El aumento de infraestructuras también ha tenido un reflejo en términos generales en los
equipos de alta tecnología sanitaria disponibles en el conjunto de los servicios de salud. El SNS cerró el 2022 con
202 aparatos nuevos. El refuerzo encaja dentro de los planes del Ministerio de Sanidad para impulsar las compras y relevos mediante el
Plan Inveat financiado con los Fondos Europeos.
En todo caso, el despliegue no ha sido equitativo. El mayor incremento se ha producido en el
inventario de equipos de diálisis que ahora cuenta con
5.399 aparatos, lo que representa 146 más que hace un año. También se han sumado 19
tomografías por emisión de fotones (181), 14 nuevos
TAC (919), 14
angiografías por sustracción digital adicionales (354) y 8
resonancias magnéticas (755).
Otros equipos como la
liotricia extracorpórea (115), las
bombas de cobalto (3), los
aceleradores de partículas (269) o los
densitómetros óseos (299) no han sufrido grandes variaciones. Mientras que las
gammacámaras (130), las
salas de hemodinámica (283), las
tomografías por emisión de positrones (95) o las
mamografías (677) han protagonizado ligeros recortes.
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