La
Estrategia de Salud Digital avanza sin fisuras y "evoluciona según lo previsto". Hace un año y medio que se puso en funcionamiento y esta primera fase finalizará en 2026, con el desarrollo de proyectos encuadrados en
sus 10 líneas de actuación horizontales y tres transversales. Una de sus características es la participación de los profesionales sanitarios a la hora de
disponer de productos reutilizables en el Sistema Nacional de Salud (SNS).
De hecho, desde el Ministerio de Sanidad aseguran a
Redacción Médica, que este trabajo es una de las "principales fortalezas del proceso": "Destaca la intensa implicación de los profesionales sanitarios y tecnológicos de las comunidades autónomas, siguiendo un
novedoso modelo colaborativo que aprovecha la experiencia previa y conocimiento de cada una de las autoridades sanitarias implicadas, cuyo resultado será
disponer de productos reutilizables en todo el SNS". De esta manera, el departamento que lidera en funciones José Miñones quiere garantizar
la equidad y la cohesión en la prestación de estos servicios en todo el territorio nacional.
Tal y como detallan fuentes ministeriales, para cumplir con los hitos acordados con la Unión Europea (UE) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, su principal reto es
mantener la sostenibilidad de los servicios digitales que se están desarrollando y evolucionando más allá del horizonte temporal del año 2026 y la
implementación del Reglamento del Espacio Europeo de Datos de Salud, que se encuentra en fase de debate por parte de los estados miembros y la Comisión Europea.
Líneas estratégicas en salud digital
Para lograrlo, entre sus
áreas de intervención están: la vigilancia de los riesgos y amenazas para la salud;
la promoción de la salud y prevención de la enfermedad y de la discapacidad; la atención sanitaria; los procesos de gestión que apoyan la realización de las funciones sanitarias y su uso eficiente; la
interoperabilidad de la información a nivel nacional e internacional; el refuerzo de los servicios digitales del SNS; el desarrollo de la cartera de servicios del SNS bajo criterios de evidencia científica y de la relación coste/efectividad; la ordenación profesional, la formación sanitaria especializada y la formación de postgrado; la
creación de un Espacio Nacional de Datos Sanitarios para su tratamiento y análisis masivo y el establecimiento de condiciones habilitantes y recursos facilitadores para la generación y extracción de conocimiento; y
el sistema de información sanitaria para la evaluación de la actividad, calidad, efectividad, eficiencia y equidad del SNS.
Mientras que las tres líneas estratégicas se centran en el
desarrollo de Servicios Públicos Digitales en el sector salud; el impulso de la interoperabilidad de la información sanitaria; y la extensión y el
refuerzo de la analítica de datos y de la explotación de información para la "inteligencia de negocio" del SNS.
"Documento vivo" que puede actualizarse
Aunque no ha tenido ningún cambio desde su presentación en diciembre de 2021, Sanidad indica que es un
"documento vivo" que puede actualizarse si así se decide por los miembros de la Comisión de Salud Digital del SNS. Concretamente, solo en 2023 va a contar con una
inversión de 400 millones de euros, entre ellos 130 dedicados a la puesta en marcha del Plan de Atención Digital Personalizada y otros 65 millones de euros que se destinarán a proyectos tractores para Servicios Digitales de Salud.
Asimismo,
se impulsarán herramientas como la telemedicina y la teleconsulta en el abordaje de las enfermedades raras. Hay que recordar que esta estrategia está enmarcada en los fondos asociados al mecanismo de 'Ayuda a la Recuperación para la Cohesión y los Territorios de Europa (REACT-EU)' y al 'Mecanismo de Recuperación y Resiliencia'.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.