El
Gobierno ha dado un paso adelante en la atención a la
salud mental de los profesionales y ha anunciado la creación de una
Guía para la
vigilancia sanitaria específica de las personas trabajadoras expuestas a riesgos psicosociales y/o con trastornos mentales y del comportamiento. Se trata de una demanda que el colectivo de
profesionales de la salud, junto a los sindicatos, lleva solicitando durante años, al estar especialmente expuestos a estos factores.
Según ha detallado el Ejecutivo en una
respuesta parlamentaria al Grupo Popular, esta Guía, que está elaborando junto al
Ministerio de Sanidad, persigue el objetivo de
prevenir e identificar las
patologías asociadas a los riesgos psicosociales, así como la promoción de una comunicación efectiva para su tratamiento. Para ello, la
creación del Comisionado de Salud Mental se presenta como una pieza clave a la hora de impulsar estas estrategias centradas en e
l bienestar psicológico de los profesionales sanitarios y del resto de trabajadores.
Junto a esta guía, otro de los puntos clave anunciados por el Gobierno tiene que ver con la inclusión de los
trastornos mentales y del comportamiento en el
Sistema de Vigilancia de Salud Laboral de la Red de Vigilancia en Salud Pública. Esta medida permitirá tener un mayor conocimiento de la prevalencia de este tipo de trastornos en el ámbito laboral y facilitará la implementación de medidas preventivas.
Las medias de salud mental de profesionales, a debate
Además, para
garantizar el debate y el consenso de las medidas a desarrollar, se utilizará como
foro de discusión la
Estrategia de Salud Mental 2022-2026 del SNS. Esta contará con dos comités, que representarán, por un lado, a las
comunidades autónomas y al
Ingesa; y por otro a las
sociedades científicas y las
asociaciones profesionales, y de pacientes y familiares.
Junto a estas, la
Ponencia de Salud Laboral de la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, y la
Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo 2023-202 se presentan como otras dos formas de asegurar un enfoque participativo respecto a la toma de decisiones en materia de salud mental de profesionales.
Por otra parte, en el marco de la
coordinación interministerial, se ha constituido el
Grupo Técnico de Enfermedades Profesionales, que se encargará de analizar y evaluar las posibles enfermedades profesionales relacionadas con los riesgos psicosociales en el ámbito laboral.
Tal y como detalla el Ejecutivo, esta serie de medidas pretenden “profundizar en el reconocimiento del
sufrimiento psíquico generado por determinados entornos laborales y en el análisis de sus causas”. Para ello, se centrarán en conocer la influencia que los factores de
riesgo psicosociales tienen en la salud mental de los trabajadores y se estudiará
qué actividades son las más afectadas por esos factores de riesgo.
Prevenir los riesgos psicosociales en la sanidad
Sindicatos como
UGT y
CCOO ya han reivindicado en numerosas ocasiones el reconocimiento de los
riesgos psicosociales como enfermedad profesional para los
sanitarios del país. Entre su argumentario, destaca la alta exposición de estos trabajadores al
estrés, a la
depresión y a la
ansiedad, una combinación de riesgos que
puede dar lugar a enfermedades cardiovasculares. Junto a esto, el
impacto negativo que ha dejado la pandemia respecto a la salud mental del personal sanitario se presenta como un agravante de los problemas de salud física y mental que estos pueden sufrir a causa del
agotamiento y la
tensión.
En atención a estas demandas, el
Ministerio de Trabajo y Economía social ya ponía sobre la mesa el pasado mes de febrero la posibilidad de reforzar las herramientas para prevenir este tipo de contingencias en el ámbito laboral. Para ello,
Yolanda Díaz, responsable de esta cartera y vicepresidenta del gobierno, se comprometía a celebrar una
Mesa de Diálogo Social, que se presentaba para los sindicatos como una primera toma de contacto para abordar las diferentes cuestiones que atañen a esta problemática.
"Creemos que todo e
l sistema público de salud, sanitario y sociosanitario debe tener una
evaluación adecuada de los riesgos psicosociales que son inherentes a su actividad. En la mesa de diálogo social se debe incidir y se debe marcar la
línea de ruta para abordarlos de forma preventiva como una
enfermedad profesional que tenga un tratamiento posterior por parte de las mutuas", explicaba a este medio
José de las Morenas, coordinador de la Secretaría Confederal de Salud Laboral de UGT.
Comisionado de Salud Mental
En el tratamiento de todas estas cuestiones, el
Comisionado de Salud Mental se presenta, por parte del Gobierno, como un elemento clave. Este organismo, que está
dirigido por Belén González Callado, ya ha asegurado que se centrará, entre otras cosas, en el impulso de medidas que
palíen el sufrimiento psíquico de los trabajadores.
El ‘
burnout’, las
guardias, la
nocturnidad, o el temor a agresiones son otros de los
factores que merman la salud mental de los profesionales de la sanidad y sobre los que este comisionado se ha comprometido a actuar. “No solamente se va a trabajar en la inclusión de l
a patología mental como contingencia profesional, sino que se va a hacer un esfuerzo de
vigilancia epidemiológica al respecto, que nos dé información sobre el fenómeno y oriente la toma de medidas”, explicaba a
Redacción Médica la directora, González Callado.
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