Sanidad reconoce una pérdida de inmunidad temprana tras superar el Covid

La evolución de los acontecimientos y el esfuerzo conjunto de la comunidad científica mundial para entender y paliar el Covid-19, están generando gran cantidad de información que se modifica rápidamente con nuevas evidencias. Una información que el Ministerio de Sanidad recoge en su informe científico-técnico sobre la inmunidad y el desarrollo de vacunas frente al Covid-19, el cual acaban de actualizar.

Según el departamento dirigido por Carolina Darias, el documento pretende hacer un resumen analítico de la evidencia científica disponible en torno a la respuesta inmune generada por el individuo frente a la infección por SARS-CoV-2, así como los avances respecto al desarrollo de vacunas.

Una evidencia que ha llevado a Sanidad a reconocer una pérdida de inmunidad temprana, es decir, que la duración de los anticuerpos contra el Covid-19 en el sistema inmune es menor hasta la ahora conocida.

Según recogen los técnicos del Ministerio, en una serie de casos se observó una reducción en la capacidad neutralizadora de los anticuerpos en el periodo de convalecencia temprano (2-3 meses tras la exposición al Covid-19) de 11,7 por ciento (rango, 2,3–41,1 por ciento) en casos de infección asintomática y 8,3 por ciento (rango, 0,5–22,8 por ciento) en casos con sintomatología leve.

Unos datos, que, si bien son reconocidos por Sanidad, ponen en tela de juicio: “El significado de estas observaciones respecto a la pérdida de inmunidad protectora con el tiempo es aún incierto”, detallan.

El efecto de las vacunas en las nuevas variantes

Respecto a las vacunas, según los datos disponibles de la efectividad en Israel e Inglaterra, el Ministerio apunta a que las vacunas m-RNA podrían prevenir la infección asintomática en un 80 por ciento, reduciendo ampliamente la capacidad de contagio. 

Desde la última actualización del informe, se han publicado muchos datos sobre las nuevas variantes del SARS-CoV-2, en concreto ha habido 32 estudios editados y 33 en fase de preprint. Al mismo tiempo estas variantes se han propagado por Europa, especialmente, la británica, que ya es predominante en España. 

“Los niveles de anticuerpos neutralizantes frente a la cepa D614G y frente a B.1.1.7 (variante británica) fueron similares a los de la cepa D614 aunque las variantes P.1. ( brasileña), y B.1.351. (sudafricana) exhibieron una notable resistencia a la neutralización”, detalla el informe.

Una disminución de los efectos de la vacuna frente a las nuevas variantes, que desde Sanidad reconocen y al mismo tiempo resaltan que, pese a ello, los sueros siguen manteniendo su inmunidad protectora.