La Mesa de Diálogo Social sobre Igualdad ha iniciado sus primeros pasos para
eliminar la desigualdad que existe en España, donde las mujeres todavía
no ocupan tantos cargos de responsabilidad como los hombres. Muestra de ello es el
sector sanitario, con una clara
feminización en Medicina y Enfermería, pero con un
techo de cristal que no termina de romperse. Para conseguirlo,
los sindicatos CCOO y UGT plantean la necesidad de impulsar
medidas que fomenten la corresponsabilidad y se dirijan especialmente a los hombres.
Según un
estudio de la Organización Médica Colegial (OMC), de los profesionales médicos que están en ejercicio la mayoría de personas que tienen una plaza en propiedad corresponde a los hombres (54,5 por ciento), frente al 45,5 por ciento de mujeres que tienen un puesto fijo. Esto significa que
seis de cada diez mujeres a día de hoy no tienen una plaza fija en el Sistema Nacional de Salud, pese a ser mayoría en las plantillas de hospital.
Las mujeres médicas también
se incorporan más tarde al empleo y por esa razón en la actualidad hay en España
más médicos jubilados (83,5 por ciento) que
médicas jubiladas (16,5 por ciento). Otro dato a tener en cuenta
en esta discriminación de género es la
conciliación familiar. Las mujeres médico en excedencia o baja temporal (achacado a la maternidad) se traducen en el 77,3 por ciento del total, frente al 22,7 por ciento de médicos que están de baja.
"La brecha salarial y el techo de cristal son dos de las cuestiones que siempre salen en los
planes de igualdad dentro del ámbito de sanidad, es una constante, nunca faltan", lamenta
Silvia Espinosa, secretaria de Mujeres e Igualdad de la
Federación Estatal de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Comisiones Obreras (FSS-CCOO), que hace hincapié en la relación entre ambos problemas: "La brecha salarial es un compendio de todas las
discriminaciones y desigualdades, y el techo de cristal es una consecuencia de ella". El sindicato ha pedido al Gobierno destinar un 0,5 por ciento de nuevos fondos adicionales para luchar contra la brecha salarial.
Brecha salarial y techo de cristal
El problema puede superar los límites de los centros de salud y hospitales. "La pieza angular de la
"Hay que hacer que los hombres se sientan tan responsables como nosotras y sean ellos quienes pidan estos tiempos de conciliación"
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discriminación de las mujeres en el ámbito laboral está en casa y es la
no corresponsabilidad de los hombres en los cuidados. Las mujeres tenemos encima la responsabilidad, casi en solitario, de atender a las personas dependientes, las familias y los hogares...", denuncia la representante de CCOO.
Lo mismo considera
Gracia Álvarez, secretaria de Salud, Servicios Sociosanitarios y Dependencia de FeSP-UGT:
"Hay que hacer que los hombres se sientan tan responsables como nosotras y sean ellos quienes pidan estos
tiempos de conciliación, de manera que esto no suponga una c
arga negativa para las mujeres porque no han estado dedicando tanto tiempo como los hombres al trabajo", argumenta Álvarez, que ejemplifica el perjuicio laboral que esta realidad conlleva para las médicas: "Con las
guardias médicas, son más mujeres que renuncian por ello que los hombres, por lo que, al final, por H o por B, son ellas las que siempre reciben menos dinero".
Análisis en profundidad
Para ambas representantes sindicales, es necesario
llegar a la raíz del problema "Hay que ver cómo ponerle una solución para que esto no suceda y analizar las causas, que no siempre están en la capa más superficial", defiende Álvarez, a lo que Espinosa añade: "Hay que hacer un análisis porque los datos deben darse siempre
separando los conceptos fijos y variables, que es donde se ve la
diferencia de salarios. Hay que poner la lupa en dónde y por qué".
Como medidas en los planes de igualdad, destaca la responsable de CCOO, también están las acciones positivas en favor de las mujeres: "Ante la misma idoneidad para el puesto, se escogerá a una mujer allá donde no esté representada como debería", explica Espinosa, que también aboga por la educación en gestión: "A través de la f
ormación se puede capacitar más a las mujeres para esa promoción a cargos de responsabilidad o directivos, por ejemplo, en temas de liderazgo o informática avanzada".
Para conseguirlo, los sindicatos van a trasladar sus peticiones al Congreso. "Vamos a trasladar esto a los partidos para incidir en la importancia de tomar en consideración la brecha salarial y
quién ocupa los cargos de mayor responsabilidad, que suelen ser hombres, cuando mayoritariamente en la sanidad somos mujeres, también en Medicina", añade Gracia.
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