Un estudio de la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD) ha cifrado en 1.563 euros la brecha salarial entre hombres y mujeres en el ámbito de la salud y los servicios sociales. De media, las mujeres que trabajan en esas áreas cobran 31.025 euros anuales, mientras que sus compañeros hombres perciben 32.588 euros. En comparación con otros 10 ámbitos laborales, es la cuarta brecha menor. En educación, artes y humanidades y ciencias, la diferencia de salario entre hombres y mujeres es más baja.
“Es indudable que existe un techo de cristal si atendemos a los números, y yo añadiría otro fenómeno relacionado: los suelos pegajosos, la sobrecarga de tareas profesionales y domésticas que hacen que la mujer se quede en puestos de menor salario, menor prestigio y menos cualificación”, ha dicho Amaya Mendikoetxea, rectora de la Universidad Autónoma de Madrid en el debate la Fundación CYD “Universidad y techo de cristal: situación actual y retos”.
Para Concha Monje, catedrática e investigadora de la Universidad Carlos III de Madrid, “hay un porcentaje significativo que no piensa que ese puesto sea para ellas porque consideran que sus capacidades no están a la altura y no es cierto”. “Sí valemos, demostrémoslo y vayamos a por todas”, ha añadido Monje.
Según el análisis de la Fundación, las mujeres son amplia mayoría en los estudios del ámbito de salud y servicios sociales: representan el 73% del total. Además, tienen un mejor rendimiento académico que sus compañeros hombres. Analizando la ratio entre los créditos universitarios matriculados y los aprobados, las mujeres superan el 90,2% de los créditos, un rendimiento del 3,8% mayor que los hombres. También muestran una mejor idoneidad a la titulación, es decir, finalizan los estudios en el tiempo teórico estimado. El 69,6% de las estudiantes acaban su título en la duración prevista, frente al 57,3% de los hombres.
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