España y Francia han cerrado un
acuerdo con el que podrán ceder médicos y enfermeros al país vecino cuando la situación lo requiera. El 'trato' se ha incluido en el nuevo
Tratado de Amistad y Cooperación firmado por Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y Emmanuel Macron, presidente de la República Francesa. Los distintos actores sanitarios han hecho una
valoración temprana del acuerdo, aunque en todos los casos recuerdan que es pronto y todavía no se conocen las peculiaridades del posible intercambio. Aunque hay disparidad de opiniones, es generalizado el 'miedo' a que una medida como esta, de no estar bien delimitada, pueda convertirse en
vehículo para la fuga de talento sanitario español a otros países.
Incertidumbre entre los sindicatos médicos
La
Confederación de Sindicatos Médicos (CESM) se ha mostrado "sorprendida" con la noticia y tiene dudas sobre el desarrollo de la medida. Su
presidente, Tomás Toranzo, es crítico con la decisión de Sánchez y Macron ya que consideran que no se ha tenido en cuenta a los profesionales para tomar esta decisión.
Para Toranzo, el nuevo acuerdo no tiene
"operatividad práctica ninguna". Desde la CESM aseguran que el tratado les pilló completamente "de sorpresa" y que la única colaboración internacional existente válida es la de a través de las ONGs, con países que lo necesiten en casos de, por ejemplo, catástrofes.
"La única colaboración válida es a través de las ONGs"
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El Gobierno no es quien tiene los médicos, son las comunidades autónomas. Debería plantear estas propuestas con ellas y ver cómo les afecta, además de modificar el estatuto marco para que no se pierdan ni médicos ni oportunidades", reconoce Toranzo, para quien el nuevo tratado "no es más que un brindis al sol".
Los enfermeros ven el acuerdo de forma "positiva"
Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería (CGE), sí hace una valoración
positiva del acuerdo y pone de relieve que "la colaboración entre países vecinos siempre debe de fomentarse, no solo en momentos de crisis sanitarias". Así, desde el CGE celebran que se acuerde "cualquier colaboración en esa materia" entre España y Francia.
Aun así, deja abierta la puerta a cómo se debe articular ese intercambio de profesionales y apunta a que
"este debería ser por un tiempo limitado", pues en el caso de las enfermeras "ahora mismo hay una grave escasez de profesionales". "Debemos asegurarnos de que una medida de este tipo no pueda ser utiliza posteriormente para
propiciar una fuga de enfermeras a otros países", advierte Pérez Raya.
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