Mercadona está en busca de
médicos para incorporar a sus plantillas. Sin embargo, el imperio comercial de Juan Roig
recompensa económica por igual a los graduados o licenciados en Medicina que a los médicos con MIR, a pesar de la distinción formativa. Así se pone de manifiesto en las últimas
ofertas de trabajo publicadas en la plataforma de la cadena de supermercados, en las que no se ofrece ninguna diferencia retributiva a los profesionales de Medicina especialistas respecto a los que no, a pesar de que aseguran aplicar una política de Recursos Humanos reconocida por lograr “motivación y rendimiento” entre sus trabajadores.
Por un lado, la
compañía necesita médicos (sin necesidad de MIR) para trabajar en la provincia de
León. Por el otro,
médicos especialistas en
Medicina del Trabajo con disponibilidad para ejercer preferiblemente en País Vasco, Navarra, La Rioja, Aragón, Cantabria, Asturias y Galicia. A pesar de que la especialidad médica es un requisito
“imprescindible” para lograr este segundo puesto, la horquilla salarial y tipo de contrato son idénticas en las dos ofertas:
indefinido, con una retribución anual bruta de
48.789 euros con progresión salarial a 74.066 euros.
El resto de requisitos para poder acceder a las filas de
Mercadona también son iguales en ambos anuncios: disponibilidad para desplazarse y viajar;
disponibilidad horaria de lunes a sábado; carné de conducir y vehículo propio; capacidad de comunicación; e interés en el trabajo en equipo.
La "trampa" habitual en mutuas y empresas privadas
Sin hacer alusión explícita al modo de operar de Mercadona,
Pilar Niño, presidenta de la Sociedad Española de Medicina y Seguridad del Trabajo (Semst), asegura en
Redacción Médica que un importante número de mutuas y empresas privadas llevan a cabo una especie de “trampa” a la hora de contratar a médicos ante la
falta de especialistas de Medicina del Trabajo en el mercado.
“Las mutuas o empresas pueden contratar a médicos generalistas para hacer los reconocimientos médicos. Eso sí, ese reconocimiento médico tiene que estar
revisado y firmado por un médico especialista en Medicina del Trabajo”, señala la presidenta, que sostiene que esta es una práctica habitual entre las empresas, que se amparan en el déficit que sufre la dispciplina, a la cabeza en tasa de abandono de médicos residentes. Igualmente, al tratarse del sector privado, sostiene que cada empresa puede estipular la horquilla salarial que considere pertinente.
“No va a haber médicos especialistas para Medicina del Trabajo; tendrán que tirar con médicos extracomunitarios generalistas y, a continuación,
un especialista se encargará de supervisarlo y firmarlo. Es duro, pero es la realidad”, se lamenta Niño, remarcando que España se quedará, a corto plazo, sin médicos del Trabajo:
“Es una situación más preocupante que la de Medicina de Familia”.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.