La
investigación es fundamental en Ciencias de la Salud. A nivel general, por encabezar el desarrollo de todo tipo de soluciones clínicas y favorecer la mejora del estado físico y mental de la sociedad. A nivel profesional, por alimentar el currículo de médicos, enfermeras o farmacéuticos y aumentar sus posibilidades de acceder a puestos de trabajo o financiación. Sin embargo, para poder influir en la vida de dichos sanitarios, su trabajo debe de ser evaluado. En este sentido, el profesorado universitario y el personal investigador funcionario cuentan con
los sexenios de investigación, un proceso que cada seis años les permite analizar su trabajo. A finales de año, se presenta una nueva oportunidad, tanto para conocer el estado de su proceder como la adquisición del complemento retributivo adherido a estos análisis.
Y es que la Comisión Nacional Evaluadora de la Actividad Investigadora (Cneai) -organismo dependiente de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca)- se prepara para
iniciar el análisis de los avances de decenas de integrantes del ámbito científico de todas las disciplinas, incluidas las sanitarias. Motivo por el que se han publicado los criterios en los que se basarán las mencionadas instituciones para analizar el trabajo de los investigadores en la actual convocatoria.
La Cneai exige la presentación de
cinco aportaciones principales -adecuadamente depositadas en repositorios institucionales, temáticos o generalistas de acceso abierto- y en la que la persona solicitante haya participado activamente-, que podrán acompañarse de dos sustitutorias. Estas se traducen en artículos, libros, capítulos de manuales o patentes, pero también informes, trabajos técnicos o labores en congresos, aunque estas últimas tendrán carácter complementario o extraordinario. El organismo señala que tiene que tratarse de contribuciones no presentadas en anteriores sexenios de investigación. Además, puntualiza que el número de elementos entregados puede ser menor si tienen una relevancia extraordinaria o el investigador justifica situaciones de permisos de maternidad o paternidad o excedencias de distintos tipos.
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Cada candidato podrá presentar cinco aportaciones a analizar
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Hay que destacar que estas aportaciones solo serán valorables
si contribuyen al progreso del conocimiento y presentan impacto científico y social. En este sentido, se analizará el número de referencias a dichos trabajos, la importancia de la revista científica en la que aparecen publicados, la obtención de premios, el cumplimiento de los estándares éticos o la aparición de políticas públicas o soluciones técnicas a partir de estos. Por otro lado, la Cneai valorará que la investigación se haya realizado en español o en las lenguas cooficiales y que tenga un carácter multidisciplinar.
Criterios específicos para el campo de la salud.
Más allá de los criterios generales, existentes algunas especificidades por campo de investigación. Es el caso del área de
Medicina y Especialidades Sanitarias, donde se permitirá la presentación de casos clínicos como aportación extraordinaria. En concreto, tan solo se podrán dos trabajos de este tipo.
En el caso del campo del área de
Biología Celular y Molecular y Ciencias Biomédicas Básicas no existe ningún requisito especial. Los investigadores de este ámbito se basarán en los criterios generales.
Solicitud de la evaluación
Además de los criterios, el Boletín Oficial del Estado (BOE) recoge también los pasos que se han de dar para la solicitud de la evaluación investigadora. Un proceso que pueden demandar
los docentes con contrato indefinido en el sector universitario -catedráticos y titulares-, además de los relativos a las escalas de profesor de investigación, investigador científico y científico titular del entramado de centros dependientes de la Administración General del Estado.
Estos podrán postularse al análisis a través de la sede electrónica de la Aneca. Allí, adjuntarán toda
la documentación, incluidas las aportaciones -cada una con un breve resumen y los datos necesarios para su identificación-, el currículo generado tras cumplimentar la solicitud, los indicios de relevancia de la investigación, la hoja de servicios emitida por la universidad o centro de investigación y un documento en el que se expliquen exclusivamente las actividades de investigación, desarrollo e innovación de los años sometidos a evaluación.
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Un investigador puede acumular hasta seis sexenios
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En caso de recibir el visto bueno de la Cneai, el docente o científico accederá a
un complemento retributivo por superar el sexenio de investigación. La persona puede acumular hasta seis, lo que se traduce en un importante incentivo económico. Hay que señalar que las profesionales que no cuentan con un contrato indefinido pueden participar en el proceso y conseguir sexenios, pero la cuantía monetaria no se comenzará a recibir hasta que obtengan una plaza fija.
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