El
sesgo de género sigue presente en el
mundo sanitario. De hecho, las mujeres ocupan
menos del 30 por ciento de los puestos de
liderazgo en Medicina tanto en asistencia sanitaria como en la participación en organizaciones profesionales y en
posiciones académicas e investigación. Es una de las conclusiones que se extrae del proyecto 'Mujeres en Medicina en España (Womeds)', un estudio pionero impulsado por la
Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme) que se ha presentado este martes.
Pilar Garrido, presidenta de Facme, ha explicado que este estudio nace de la idea de que existía un sesgo de género. "Pero no vale con pensarlo, queríamos hacer un
trabajo transversal para ver si de verdad había una
brecha de género en puestos de responsabilidad", ha asegurado Garrido, quien ha añadido que se trata de un "proyecto vivo" que espera
actualizar los datos de forma anual. "Somos muy buenas para trabajar pero
no nos dejan liderar", ha afirmado.
Este análisis ha sido realizado con los
datos de 2019-2021 en los que se destaca que el
26 por ciento de los directores de departamento en las Facultades de Medicina son mujeres; mientras que si se observa el número de decanas solo
llega al 27 por ciento. Sobre ello ha reflexionado Carmen Gallardo, decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Rey Juan Carlos, que ha apuntado que conforme baja el estatus de los profesionales en la universidad
se igualan las cifras. Es decir, la diferencia que se ve entre los catedráticos no se aprecia de la misma forma en los
profesores asociados.
"La situación de las universidades
es preocupante. A pesar de haber muchas mujeres, los puestos de liderazgo son de los hombres. También se puede ver en quién dirige las tesis doctorales, el
62 por ciento son ellos", ha especificado Gallardo.
Infrarrepresentación de jefas de Servicio
En cuanto a la
presencia femenina en la actividad asistencial de los centros públicos, la mayoría de profesionales son mujeres (el 61 por ciento). Sin embargo, no acceden a puestos altos como jefas de Servicio y Sección. Beatriz González López-Valcárcel, catedrática en Economía de la Salud, ha expuesto que de las
12 comunidades autónomas que han presentado sus datos (representando al 71 por ciento de la población española) los porcentajes oscilan entre el
20 por ciento de jefas de Servicio en Andalucía y el 47 por ciento en Navarra. "Todas las CCAA tienen una
infrarrepresentación como jefas de Servicio. En jefas de Sección, que es de menor responsabilidad, no hay tanta diferencia", ha señalado.
Por otro lado, los
congresos científicos son un reflejo también de este sesgo de género. A pesar de que ellas siempre están invitadas, su participación es escasa. "Es un
patrón sistemático", comenta González. Respecto a las sociedades científicas, solo
tres tuvieron una presidenta durante el periodo de 2019 a 2021, ocho tuvieron tanto presidentas como presidentes y el resto solo varones.
En esta misma línea, los
colegios oficiales de médicos también son una muestra de representación institucional mayoritariamente masculina. Solo
7 de los 51 colegios tenían una presidenta durante estos tres años de análisis, aunque hay
más médicas colegiadas que hombres. Mientras que en las academias de Medicina, González ha indicado que todavía es más palpable: "En las
juntas directivas de 5 de 13 de estas instituciones no hay ninguna mujer".
Espacio para la investigación femenina
Por último,
Cristina Avendaño, vocal de Facme, ha expuesto cuál es la situación en investigación. Las conclusiones son que hay
menos solicitudes de proyectos liderados por mujeres y que aquellos que se les conceden a ellas están
menos financiados.
"Hemos visto que ellas solicitan el
67 por ciento de los contratos temporales para integrarse en proyectos de investigación; pero para los programas de liderazgo, los llamados de intensificación de la actividad investigadora, solo el
30 por ciento de solicitantes son mujeres", ha incidido.
Según este documento, en 2021, cerca del
50 por ciento de los 4.377 miembros de los grupos de investigación integrados en el CIBER en España eran mujeres, pero
solo el 26 por ciento de los jefes de grupo.
"Se está perdiendo talento"
Para revertir esta situación, las impulsoras del estudio han considerado que se debe cuantificar, visibilizar e
impulsar políticas que ayuden a colocar a las profesionales en esta posición: "No podemos
perder tanto talento".
Otro aspecto que se echa en falta es el número de
referentes femeninas, para que las mujeres jóvenes puedan tener ejemplos de liderazgo. Por este motivo, piden que se les de
"una primera oportunidad" y que se apliquen
cuotas de discriminación positiva en la participación de congresos.
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