Las
bajas laborales por dismenorreas o cuadros de tensión abdominal por la menstruación no logran alcanzar la tendencia que estimó el Gobierno de
alrededor de 6.000 incapacidades temporales al año por esta causa. Y es que desde que empezaron a solicitarse a partir del 1 de junio,
sólo se han tramitado 436 bajas laborales según los últimos datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Un dato que se aleja tanto del primero, a juicio de la profesión médica, ya que
las estimaciones eran "demasiado altas". Las causas, concluyen desde el sector médico, son sencillas de explicar:
“No nos las piden”.
"En general
no hay tantos casos como dijo el Gobierno que se iban a producir. Normalmente somos los médicos de
Familia los encargados de dar estas incapacidades temporales, en el 90 por ciento de los casos, y en mi consulta, e incluso en las de la gran mayoría de mis compañeros,
no hemos tramitado ninguna baja por este motivo", puntualiza María del Mar Martínez, vocal de Atención Primaria Urbana de la Organización Médica Colegial (OMC).
En cuanto a las
dificultades que puedan existir desde el médico para tramitar la baja por regla dolorosa que ralenticen el proceso y eviten alcanzar los datos previstos, Martínez considera que no existe ninguna y que
esos datos "no se van a alcanzar nunca". "No hay ningún impedimento por parte de los médicos para tramitarlas, aunque
la cita puede retrasarse tres o cuatro días, dependiendo de cuándo se solicite. Pero normalmente, cuando requieren el parte de baja, aunque no tengan cita, pueden acudir como no demorable a la consulta", señala.
"Las bajas por dolor menstrual no se piden"
Son explicaciones semejantes a las que dan en la
Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM). “Lo que pasa es que estas bajas
no se piden”, sentencian desde la organización que dirige
Tomás Toranzo.
Estas mismas fuentes apuntan, además, que las bajas por dismenorrea
“ya estaban previstas en la legislación”, por lo que no se preveía un incremento de las peticiones. “Era rizar el rizo”, destacan.
"Hay empresas que pueden no estar pidiendo la obligatoriedad del justificante por reglas dolorosas y entonces esos casos no computan"
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Empresas que no solicitan los justificantes por 'reglas dolorosas'
Otro motivo por el que las bajas no estén registrando unos datos tan elevados puede depender del
nivel de registro de las empresas. "Por ejemplo en las públicas, siempre piden bajas o incapacidad temporal pero
otras pueden no pedir la obligatoriedad del justificante y entonces no se computa", reconocen desde la OMC.
Aunque es difícil conocer la incidencia real de esta medida, los datos aportados revelan que está lejos de las estimaciones con las que trabajaba el Gobierno: según los datos del Ministerio de Inclusión, se producen alrededor de 6.000 incapacidades temporales al año por dismenorreas o cuadros de tensión abdominal por la menstruación. Por lo que de los casos que calculan que se dan al año,
sólo se ha tramitado un 7 por ciento de las bajas en los últimos tres meses.
Además, este cambio legislativo ha traído consigo una serie de "consecuencias negativas" que afectan a la privacidad de los datos sanitarios y que pueden llegar a provocar una discriminación hacia las trabajadoras dentro del ámbito laboral.
Para conocer estas consecuencias negativas,
Redacción Médica consultó al presidente del Bufete De Lorenzo Abogados, Ricardo De Lorenzo, quien indicó que
esta regulación puede plantear “preocupaciones” en términos de privacidad y protección de los datos sanitarios de la trabajadora, ya que esta situación especial de incapacidad temporal que ocurre cada mes, haría que la empresa “sea consciente de que su situación no se resolverá a corto plazo, sino que, probablemente, continuará mensualmente durante muchos años”.
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