La Primaria, a la calle el 27 de marzo para exigir 10.000 millones de gasto

Los profesionales de Atención Primaria saldrán a la calle el próximo 27 de marzo para exigir a las administraciones públicas que incrementen el presupuesto para este área y que refuercen las plantillas de médicos y enfermeros en los centros de salud. En total, exigen una dotación adicional de 10.000 millones de euros, repartida a partes iguales entre el Gobierno y las comunidades autónomas, para poder cubrir las necesidades que han detectado en el sistema, lo que permitiría que la inversión se situará en un 25% de la partida total para Sanidad. 

Las movilizaciones han sido acordadas de forma unánime por la mayor parte de los sindicatos mayoritarios del sector como UGT y Comisiones Obreras. Y también se han sumado más de un centenar de organizaciones sociales, como Medicus Mundi, que han reforzado la iniciativa. “Con las plantillas actuales no se puede satisfacer con estándares de calidad la cartera de servicios de este nivel asistencial”, ha clamado la secretaria del área de salud de UGT, Ana María Francés, en la rueda de prensa de presentación. 

Las organizaciones que han convocado esta manifestación estatal han calculado que con ese volumen de inversión se podría lograr la contratación de 8.000 médicos y 15.000 enfermeros para paliar el déficit de plantilla que arrastra la Atención Primaria. Y paralelamente también apuestan por la incorporación de un total de 5.000 profesionales de administración a la red para mejorar su funcionamiento, tras las situaciones de colapso vividas durante la pandemia. "Uno de los problemas más graves es que la población tiene una enorme dificultad para contactar con sus centros de salud, sobre todo las personas mayores", ha apuntado Manuel Martín, el presidente de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública. 

Los sindicatos han subrayado la importancia de desarrollar nuevos incentivos económicos para garantizar que los facultativos apuestan por el área de la Medicina de Familia. Mientras que también han recalcado la importancia de reforzar algunas de sus condiciones laborales básicas como su acceso a los servicios de salud mental, después del impacto y de la fuerte carga de trabajo que ha supuesto la crisis sanitaria del Covid-19. 

La movilización también servirá como una medida de presión para que el Gobierno de coalición cumpla con los objetivos marcados en el inicio de la legislatura para reforzar el Sistema Nacional de Salud. Los sindicatos han insistido en la necesidad de elevar la inversión hasta alcanzar el 7,5% del Producto Interior Bruto (PIB) del país, así como llevar el gasto medio por ciudadano al menos hasta los 2.153 euros por persona y año de la media europea. "A pesar de todas las promesas, esto no se traslada a los presupuestos que siguen siendo insuficientes", ha subrayado Ana Isabel Gracia, la secretaria de Políticas Sociales de UGT. 

Manuel Martín, Ana María Francés, Ana Isabel García, Esther Nieto y Enrique Revilla anuncian la movilización

La Atención Primaria en el medio rural

Las organizaciones convocantes aspiran a que la manifestación se produzca de forma sistemática en todas las comunidades autónomas, lo que permitirá también hacer un especial hincapié sobre las necesidades que atraviesan los centros de Atención Primaria de las áreas más despobladas. Los sindicatos han coincidido en la importancia de reforzar estas parcelas y de garantizar el acceso a las personas más mayores. "Las consultas telefónicas, telemedicinas y el correo electrónico no pueden suplantar a las consultas presenciales", ha apuntadon Gracia. 

En la lista de reivindicaciones también se reclamará a las administraciones públicas un cambio en la planificación de la atención a los pacientes para no limitarla exclusivamente a la medicalización. De esa forma, además de reforzar las plantillas de médicos, enfermeros y administrativos, también se quieren sumar nuevos roles profesionales como los podólogos, los psicoterapeutas o los psicólogos clínicos para garantizar un servicio más transversal. 

Los sindicatos han apuntado que este tipo de inversión terminará produciendo una mejora en todo el sistema, ya que se aliviará la carga de los especialistas de otras áreas y también de los servicios de urgencias de los hospitales. "Se deben transformar las áreas de salud para que se conviertan en espacio para la integración de todas las poblaciones", ha apostillado la secretaria de Políticas Sociales de UGT.