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Infecciosas: "El SNS debe aprender a tener sobrenecesidad de recursos"

Redacción Médica entrevista a Benito Almirante, de Seimc, sobre la gestión de la pandemia en España

Benito Almirante, Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc).

20 abr 2020. 18.00H
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POR I. P. NOVA
Con la pandemia del coronavirus Covid-19, los diferentes actores sanitarios están adoptando roles de lo más dispares a la hora de afrontar la gestión, control y tratamiento del virus. Un papel que, en el caso de los expertos en Infecciosas, cobra especial importancia pues son uno de los factores humanos principales a tener en cuenta para prevenir la transmisión y contagio entre profesionales sanitarios.

Redacción Médica, para plasmar sus reflexiones en el documento 'Lecciones del Covid-19 (qué ha aprendido el sector sanitario español ante la pandemia)', se ha puesto en contacto con la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc) y, concretamente, con su portavoz Benito Almirante para conocer dónde y cuándo creen que se debería de haber actuado mejor y qué se debe hacer a partir de ahora.

¿Cuáles son los aciertos y errores que han tenido las autoridades españolas en la gestión del coronavirus Covid-19?

Desde el punto de vista sanitario esta crisis tiene unas características muy diferentes a otras epidemias de los últimos años. En primer lugar, se inicia en un territorio definido y a pesar de los esfuerzos por su contención se extiende de manera progresiva y gradual a la mayoría del planeta. En un principio, todo hacía pensar en una epidemia restringida a la zona de su inicio y a áreas colindantes, como había sucedido con el SARS del año 2002 o el MERS-Cov del año 2012. Sin embargo, no se pudo evitar el salto de fronteras y la rápida difusión de la epidemia.

La valoración clínica inicial en China hacía pensar en una enfermedad parecida a la gripe con unas frecuencias de cuadros graves que no superarían el 10 por ciento del total de afectados. El acierto más importante fue considerar desde su inicio que podría rápidamente trasladarse a otros países y ocasionar una pandemia, necesitando todos los países preparar a su población a los sistemas sanitarios. El error fue considerar un patrón de enfermedad similar al observado en China, que después se comprobó que era muy diferente en Europa y en USA. Las frecuencias de enfermedad grave o muy grave era muy superior y en algunos momentos ha estado a punto de desbordar el sistema sanitario de diferentes países, entre ellos España.

Ante una crisis similar futura, ¿qué medidas deberían adoptarse en cuanto a recursos humanos, recursos materiales, y organización?

Sin ninguna duda, de esta pandemia los responsables de los sistemas de salud han de aprender que es necesario valorar siempre una sobrenecesidad de sus recursos, a todos los niveles (de personal, de instalaciones, de recursos diagnósticos y terapéuticos y de organización rápida de las respuestas). Por lo tanto, al igual que sucede en otras situaciones de riesgo (riesgo nuclear, riesgo de contaminación química, riesgo de incendios, accidentes múltiples de tráfico, etc) se deben tener siempre actualizados planes de contingencia globales y en cada nivel asistencial sanitario que permitan disponer de toda la infraestructura necesaria para ofrecer una respuesta rápida a crisis sanitaria relacionadas con agentes infecciosos transmisibles.

¿Qué podrían aportar los médicos de Enfermedades Infecciosas que no hayan podido aportar en la crisis actual?

Los especialistas en Microbiología y los expertos en Enfermedades Infecciosas (agrupados en la Seimc) han aportado a la solución de esta crisis enormes esfuerzos en diferentes ámbitos: en el de la atención de los pacientes ingresados en los hospitales y en su organización y gestión para minimizar el riesgo de la transmisión a profesionales de la salud o a otros pacientes, en el del diagnóstico microbiológico de la infección y en su seguimiento, en el de la formación a todos los profesionales sanitarios implicados, en la asesoría a las autoridades sanitarias para la gestión de la crisis y la adopción de medidas eficientes de control y, en último lugar, en la aportación de nuevos conocimientos científicos y en la aportación a la comunicación a la sociedad de todos los aspectos sanitarios que ayude a los ciudadanos a entender mejor los riesgos, los mecanismos de prevención y las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias.

Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.