Faltan médicos en nuestro
sistema de salud pero, si un profesional en
plenas facultades quiere seguir trabajando, le ponen pegas. Con esta reflexión, el
vicesecretario general del sindicato Médico (CESM)
Gabriel del Pozo, ofrece una posible solución al Ministerio de Sanidad de
María Luisa Carcedo para paliar el déficit de facultativos dentro del
Sistema Nacional de Salud (SNS): eliminar las
trabas burocráticas de los médicos para alargar su
edad de jubilación hasta los 70.
El también
presidente de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts) ve poco práctico obligar a la gente a jubilarse a los 65 cuando existe un "problema de falta de médicos" latente en
España. Sus declaraciones, recogidas por
Redacción Médica tras
una iniciativa de la organización de empresarios (CEOE) que abogaban por jubilar a los 65 para crear "empleo de calidad", invitan a eliminar los problemas burocráticos con los que se encuentra el médico que no quiere cesar su puesto
una vez cumplidos los 65.
En la actualidad, son muchos los organismos, entre ellos el
Sindicato Médico de Murcia, que han llegado a proponer a
sus afiliados una serie de pautas para no cesar en su cargo. Medidas y herramientas para que el profesional que esté d
esempeñando sus funciones (y en pleno ejercicio de sus facultades) pueda seguir trabajando más allá de las 65.
El trámite burocrático para alargar la edad de jubilación es muy largo
En su mayoría, estos problemas con los que se encuentra el médico son
trámites burocráticos y entorpecimientos por parte de los sistemas autonómicos de salud. Algo que, a juicio de Gabriel del Pozo, entorpece que los médicos sigan ejerciendo mientras que
los organismos nacionales aquejan una falta de profesionales sobre todo en zonas de dificil cobertura.
"Hay especialidades que están visiblemente más envejecidas como
Análisis Clínicos y de las que no
se convocan OPE's", denuncia. En este sentido, del Pozo finaliza con la petición de que, mientras que los
Médicos Internos Residentes (MIR) se sigan formando, trabajen los sanitarios que "de forma voluntaria" quieran alargar su edad de jubilación.
En un ejemplo y acercándose a la CCAA que conoce,
Madrid, Gabriel del Pozo recuerda que
más del 30 por ciento de sus compañeros superan los 55 años y deberían de jubilarse en diez años. Con su propuesta, algunos de estos profesionales podrían tomar la
decisión de continuar ejerciendo y que ese déficit, previsible, se paliara.
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