Desde que era pequeño, la Medicina ha estado en contacto directo con el
jefe de Servicio de Oftalmología del Hospital
Clínico San Carlos y catedrático de la Universidad Complutense de Madrid,
Julián García Feijóo. Recuerda cómo de adolescente su domicilio se llenaba de estudiantes de último año de la carrera, quienes estaban
tutorizados por su padre y donde las preguntas, anécdotas y, sobre todo,
la pasión por la profesión iluminaba cada uno de los rincones de su casa.
A pesar de que su padre,
Julián García Sánchez, era un reconocido jefe de Servicio de Oftalmología en el Clínico de Madrid y catedrático de la UCM, García Feijóo
nunca se sintió “presionado” para hacer Medicina. De hecho, estuvo barajando la posibilidad de
estudiar Historia o Física, aunque finalmente descartó estas opciones para entrar en el
mundo sanitario.
La noticia de que Feijóo iba a
llevar una bata blanca, al igual que su padre, fue muy bien recibida en casa. “Su madre y yo queríamos que estudiase Medicina porque podíamos ayudarle más, ya que dominábamos también las amistades y eso le podía favorecer para poder entrar más seguro en la carrera”, ha afirmado Sánchez a
Redacción Médica.
Julián García Sánchez y Julián García Feijóo durante la entrevista.
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Escoger plaza MIR en Oftalmología
Cuando decidió entrar a Medicina, Feijóo no estaba seguro sobre a qué especialidad dedicarse. Primero pensó
formarse en Neurocirugía, pero al final lo descartó para entrar a
Oftalmología. Esta decisión la meditó "mucho", ya que estaría bajo una
"sombra paterna" por querer hacer la residencia donde su padre era el jefe de Servicio.
"Eso sí me preocupaba. Principalmente po
r cómo sería la relación con mis compañeros y con los miembros del staff del hospital, pero resulta que fue estupenda. Además, yo no elegí hacer el MIR en el Clínico por mi padre, sino porque era
el más puntero en esta especialidad”, ha afirmado.
Padre e hijo en el mismo servicio de un hospital
Estos dos médicos solo estuvieron juntos durante el primer año de residencia de Feijóo, ya que su padre abandonó el hospital durante un tiempo. En este sentido, Sánchez recuerda que el trato con su hijo era como "el de cualquier otro
MIR de su promoción". “Yo intenté que
no fuera diferente a los demás”, ha subrayado.
Tras tres años, Sánchez volvió al Clínico San Carlos, donde su hijo ya era un
médico adjunto y empezaron a trabajar de manera más unida porque, al igual que él hace años, Feijóo escogió especializarse en
glaucoma. "Trabajar con mi padre y estar al lado de un top mundial del glaucoma y de la Oftalmología es una responsabilidad y un
privilegio muy grande", ha resaltado Feijóo
En la actualidad
Sánchez está jubilado y su puesto en el Clínico lo ostenta su hijo. En este sentido, afirma orgulloso que Feijóo "siempre" ha tenido en consideración la opinión de los demás para tomar las decisiones y que, incluso ahora,
le sigue preguntando sobre aspectos relacionados con la Medicina. "Yo creo que eso a todos nos gusta que, aunque llega un momento en el que eres muy mayor y un cero a la izquierda, de vez en cuando te pregunten algo. Eso
te anima", ha concluido.
Un momento de la entrevista.
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