El lehendakari vasco,
Íñigo Urkullu, propone el establecimiento de un
toque de queda nocturno en la lucha contra el
coronavirus Covid-19. Sin embargo, la
Organización Médica Colegial (OMC) considera que hay otras medidas consensuadas que se pueden aplicar antes de llegar a una medida de este calibre.
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"La OMC no ha hecho un debate interno sobre el tema pero, de entrada,
no estamos a favor de que los toques de queda se hagan en sitios específicos, estamos a favor de que haya uniformidad", reivindica
Serafín Romero, presidente de la
OMC. En su opinión, hay que "plantear escenarios comunes en todas las comunidades autónomas" para establecer limitaciones ante el
aumento de casos, "que nos puede llevar a la medida más drástica que es el
confinamiento de todos".
Romero recuerda otras medidas "muy consensuadas", como son los
confinamientos parciales, que se pueden instaurar antes de llegar a un toque de queda. "S
i hay que limitar los horarios o el número de personas en ciertos establecimientos, habrá que hacerlo", reflexiona el presidente de la OMC, que insiste en retomar un "acuerdo común" y que éste sea "homogéneo".
El verano, subraya, "no ha hecho mella en el virus y en esta
'nueva normalidad' seguimos teniendo un gran desconocimiento sobre la Covid-19. Por ello, rechaza las "medidas espontáneas" y aboga por el consenso. "Todos los ciudadanos estamos asistiendo a magníficas medidas en algunas CCAA, pero no existe una idea común, algo que en su momento se planteó para la nueva normalidad", lamenta el representante de los médicos españoles.
Consenso experto
Ante la falta de la suficiente evidencia científica sobre el nuevo coronavirus, Romero aboga por el
consenso de los expertos, "en el ámbito de las comunidades autónomas y bajo el mando del Ministerio de Sanidad". Además, hace hincapié en la labor de
concienciación para toda la ciudadanía.
"No hay que quedarnos solo con imagenes que pueden demonizar a la
juventud, también hay que estar atentos a esos e
ncuentros entre familiares o amigos, que también están produciendo un
aumento de los contagios", advierte Romero, que defiende aplicar "
medidas restrictivas si están consensuadas por las comunidades autónomas" y siempre que no sean "producto de un solo sitio", ya que puede "c
rear inequidad o mandar falsos mensajes a la población".
"Hasta que no tengamos un horizonte terapéutico tenemos que aprender a convivir con estas circunstancias", señala el médico, consciente de que
el ambiente nocturno está asociacio a "otro tipo de relación social que facilita la relajación de medidas", entre otras cosas, por el
consumo de alcohol.
Sin embargo, no cree que establecer un toque de queda durante la noche alivie el aumento de casos. "No basta solo con eso,
habría que imponer un 'toque de queda' al número de personas en todos los eventos que también conllevan un alto riesgo", resalta Romero, que pone de ejemplo las concentraciones en bodas o comuniones.
"Hay que plantearnos medidas comunes para todos, sabiendo que
estamos en un momento de sacrificio y que tendremos que contribuir para que la pandemia de lo económico no siga avanzando. Aquí habrá que establecer limitaciones para que ganemos todos", considera Romero.
En su opinión, las medidas han de resultar de un gran acuerdo "en el ámbito del
Consejo Interterritorial y bajo un mando único sanitario" que aproveche las "magníficas medidas" que algunas comunidades están imponiendo para contener los casos, que no paran de crecer junto al
número de hospitalizaciones y UCI.
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