Un 45 por ciento de los españoles mayores de 16 años padece al menos una enfermedad crónica, en su mayor parte alteraciones osteoarticulares y cardiovasculares como hipertensión arterial y niveles elevados de colesterol en sangre, con sus posibles complicaciones a largo plazo.
De hecho, un 80 por ciento de las consultas de Atención Primaria, y un 60 por ciento de los ingresos hospitalarios se deben a estas patologías, lo que supone que este perfil de pacientes cope un gasto sanitario cercano al 80 por ciento del total.
En este contexto, el presidente de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), Antonio Zapatero, ha advertido del uso eficiente de los recursos, a menudo desperdiciados porque los pacientes crónicos sufren reagudizaciones que los llevan a visitar diversos servicios hospitalarios o de Atención Primaria pudiéndose acortar ese periplo por parte de las autoridades si lo planifican bien.
“Cuando un paciente con una o varias enfermedades crónicas presenta las reagudizaciones de sus cronicidades, entonces la respuesta de los sistemas, de casi todos, es ofrecer unos servicios hospitalarios desproporcionados, y costosos, y además muy desiguales”, ha señalado el presidente de la SEMI.
En este sentido, según ha subrayado Zapatero, presidente de la SEMI, “la cronicidad conlleva la necesidad de establecer nuevos modelos organizativos, que den mayor valor a la coordinación asistencial y estén encaminados a la provisión de servicios integrados para los pacientes, ya que han demostrado ser más eficientes, tener un menor coste y ofrecer una atención sanitaria de mayor calidad”.
Apenas un 15% del gasto para la Atención Primaria
Por otra parte, la Medicina de Familia, por medio de la Atención Primaria, “también experimenta esta desproporción, pero en sentido opuesto, representando solo el 14,6 por ciento del gasto en sanidad, cuando en realidad se asume que actúa como puerta de entrada de las personas al sistema sanitario atendiendo a cada paciente con una atención integral y con un enfoque generalista y longitudinal”, ha apuntado el presidente de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc), Salvador Tranche.
En otra línea de reflexión, para el presidente del Comité Científico del IX Congreso Nacional de Atención Sanitaria al Paciente Crónico, Pedro Abad, el tratamiento de una enfermedad no debe ser solo la medicación, es llegar al convencimiento de que lo primero es prevenirla y, si se produce, tratarla previniendo las agudizaciones y las complicaciones, teniendo en cuenta el ámbito sociofamiliar y trabajando todos los profesionales involucrados, con sostenibilidad, en una misma dirección.
“De cada cien euros, solo 14 se destinan a la Atención Primaria”
Por su parte, Salvador Tranche, presidente de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc), ha lamentado que “Asturias padece un envejecimiento del 23 por ciento, y, además, la discapacidad crónica afecta a los pacientes de la comunidad autónoma tres puntos más que al resto de España, cuidados por 1.300.000 personas”.
“Por si fuera poco, se jubilan más médicos de Familia que los que entran en la comunidad autónoma, amén de la precariedad de sus condiciones laborales”, ha incidido, al tiempo que también ha reclamado más especialistas en Medicina Interna en los hospitales.
Zapatero, en su turno de palabra, se ha preguntado por qué se celebran congresos como éste: “Ha aumentado la esperanza de vida y se vive más años, pero no mejor”, ha señalado.
Para ilustrar la descoordinación actual de la asistencia, Zapatero ha citado algunos datos recogidos de un estudio hecho en Cataluña con 5.300.000 personas: “Se ha visto que un 27 por ciento de la población visita dos o más sistemas asistenciales, y un 15 por ciento cuatro o más”.
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