Pilar Román se convirtió en 2012 en la primera presidenta de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), cargo que ostentó hasta 2014, cuando le tomó el relevo Emilio Casariego. Actual Jefa de Servicio Medicina Interna en Hospital de Requena, participa en el XXXVII Congreso de esta sociedad para tratar los retos de la cronicidad, marco sobre el que ha charlado con Redacción Médica.
¿Cuándo se dieron cuenta de que la cronicidad iba a ser un problema para la sostenibilidad del sistema?
En 2008, la SEMI ya advirtió de lo que iba a pasar y por ello nos reunimos con las autoridades. Gracias a ese empujón, en 2012 el Ministerio de Sanidad elaboró su estrategia y ahora todas las comunidades autónomas tienen la suya.
¿Por qué es un desafío?
Porque estamos alargando la vida y además se siguen manteniendo malos hábitos como la obesidad, el consumo de alcohol, el tabaquismo, que hacen que se vayan adquiriendo enfermedades. Hay que tener en cuenta que una persona, de media, presenta tres enfermedades crónicas.
¿Tienen fundamento las declaraciones que tanta alarma generan de lo peligroso que resulta que la gente viva demasiados años?
Claro que sí. Alargar la vida no es malo, por supuesto. Pero es verdad que presenta inconvenientes; tengamos en cuenta que para 2050 por cada 10 trabajadores habrá 9 jubilados y de esos, 7,5 serán dependientes. Eso es insostenible.
¿Damos años de vida o años con calidad de vida?
Damos años de vida, más expectativa pero con poca calidad. La obesidad, por ejemplo, es clave en esta situación porque desata otros problemas como la diabetes o la hipertensión.
¿Se ha quedado el médico demasiado encerrado en la consulta para solucionar un problema que parece más pedagógico?
Ojalá fuéramos verdaderamente conscientes de que en lugar de salir a curar tenemos que salir a prevenir. Pero vivimos en un sistema endemoniado donde nos hemos convencido de que solo curan los medicamentos, y eso no es curar bien.
¿Y cómo se le pone solución?
Hay que concienciar a la sociedad, que sepan que hay que cuidarse, o que si no es urgente, que no acudan rápidamente al médico. Tenemos que saber que las listas de espera no son lo más grave.
¿Qué es lo más grave entonces?
Como decía, no curar bien y que el paciente vuelva al centro sanitario varias veces porque no está bien tratado, porque no nos anticipamos a la enfermedad...
¿Para eso hacen falta más cosas que concienciar a la sociedad, no?
Sí, hay que concienciar a los profesionales, sacarles del área de confort con incentivos de todo tipo, no solo económicos. También evaluarles por resultados en salud, más allá de pagarles más o menos por el número de pacientes vistos, que además son diferencias salariales tan pequeñas que ofenden. Y acabar con el contrato de por vida.
¿Cree que una plaza fija desincentiva, que el ser humano necesita de cierta inseguridad para esforzarse?
Creo que la plaza en propiedad es la mayor privatización que existe.
¿En eso, la sanidad pública debe aprender de la privada?
Sí. En ese aspecto, sin duda.
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