El riesgo vascular y de arritmia asociada a las
hipoglucemias puede reducirse en los pacientes con diabetes gracias a los avances vividos en
monitorización de la glucosa, las nuevas insulinas y la seguridad aportada por los últimos fármacos. Así de tajante se ha mostrado Javier Ena Muñoz, adjunto al Servicio de Medicina Interna del Hospital Marina Baixa (Villajoyosa, Alicante), durante su exposición en la
XVI reunión del grupo de trabajo de Diabetes, Obesidad y Nutrición de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI).
“Tenemos herramientas para
mejorar el pronóstico de la enfermedad diabética con mayor seguridad y esto debe intentar
extenderse a toda la población. Tenemos mejores herramientas de tratamiento, de diagnóstico y de prevención, y deberían usarse en la mayoría de pacientes con diabetes”, reivindica Ena Muñoz.
Una reivindicación que surge del “decalaje” entre los avances producidos y la prescripción que muchos profesionales sanitarios hacen en su día a día clínico
. “Todavía estamos pendientes de que su uso se generalice porque la penetración en la prescripción aún es mejorable. Hay muchos pacientes que se beneficiarían de estos fármacos, pero están con los antiguos, que controlan la glucosa, pero no reducen la mortalidad”, detalla el internista.
Un gran “avance” en la hipoglucemia en los últimos 5 años
Según el experto en diabetes, el panorama ha cambiado radicalmente en los últimos cinco años gracias a la posibilidad de monitorización, las nuevas insulinas y fármacos. “Los nuevos medicamentos son más seguros porque
reducen el riesgo de hipoglucemia y mejoran el pronóstico con menos infartos de miocardio, accidentes cardiovasculares y muertes súbitas”, explica Ena Muñoz.
El internista define la hipoglucemia como el
efecto adverso “más temido” del tratamiento de la diabetes porque “afecta mucho” a la calidad de vida del paciente y porque consume muchos recursos sanitarios. “Hay muchas bajas laborales por hipoglucemias y, sobre todo, si tienen que ingresar al hospital y también afecta a la adherencia del tratamiento que trata su diabetes. Por lo tanto, son un efecto adverso que conviene prevenir”.
Para esta prevención, Ena Muñoz, resalta la aparición de nuevos fármacos que son muy activos en lograr bajar los niveles de glucosa y que tienen mucho menor riesgo de hipoglucemia de los conocidos hasta ahora como las insulinas humanas y las sulfonilureas. “Estas han quedado
relegadas a un segundo plano por el riesgo de hipoglucemias”, reivindica el internista.
Las hipoglucemias son frecuentes en pacientes diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2 con múltiples dosis de insulina. Sin embargo, estás han disminuido notablemente gracias al avance del tratamiento. “Las nuevas
insulinas de tercera generación todavía son mejores que los análogos de insulina. Ha sido un avance muy importante para reducir el riesgo”, asegura el especialista.
Prevenir arritmias con telemonotorización
Uno de los efectos de las hipoglucemias es una prolongación del QT en el electrocardiograma. “Estos pacientes tienen
riesgo de tener una arritmia circular grave con taquicardia o fibrilación articular. Esto puede desencadenar una muerte súbita, por eso es tan importante prevenir las hipoglucemias”, explica Ena Muñoz.
Según detalla el internista, el riesgo de padecer esto es mayor en los pacientes que tienen hipoglucemias con frecuencia, ya que dejan de tener una respuesta del organismo a la misma. De manera que están en
riesgo de presentar una arritmia sin haber tenido síntomas previos de hipoglucemia.
“Actualmente, para estos pacientes de diabetes tipo I que tienen un riesgo especial hay un s
istema de monitorización continua de glucosa. Este permite, a través de un dispositivo que se coloca en la piel y con una app asociada, controlar la hipoglucemia en cada instante. Ha sido un gran avance”, detalla el especialista, quien asegura que los pacientes que usan esta herramienta de monitorización continua con mucha frecuencia (más de 30 veces al día) tienen un mejor control glucémico y una gran disminución del tiempo de hipoglucemias y su frecuencia.
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