Después de la aprobación por el Consejo de Ministros del Real Decreto que establece la
nueva especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias, las sociedades científicas de Familia han querido dejar claro su postura al respecto. Tanto la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (
Semergen) como la Sociedad de Médicos Generales y de Familia (
SEMG) ponen en valor este impulso formativo de quien son sus “socios” en su entorno de trabajo, pero piden que no se obstaculice la formación de residentes de
Familia y Comunitaria y se replantee la planificación del MIR.
Uno de los principales
aspectos defendidos por Semergen es que se exige el “
reconocimiento profesional e institucional de los médicos de Familia que han desarrollado
su actividad en los Servicios de Urgencia y Emergencias y que se habiliten los mecanismos para ello”. La sociedad recuerda que la mayoría de médicos que trabajan en Urgencias son médicos de Familia, por lo que consideran que las Urgencias y Emergencias Hospitalarias “deben seguir siendo de Medicina de Familia”.
Otra de las premisas que defiende Semergen es que el
programa formativo de Urgencias “no obstaculice ni
interfiera en la formación de los residentes de Medicina de Familia. El Real Decreto de Urgencias expone que los dos primeros años serán compartidos con Urgencias, y para Semergen “se deberían tener
programas formativos independientes”.
La FSE debe replantearse la planificación de plazas MIR
La sociedad alega que el programa
formativo de Familia ha dado
sus frutos durante 30 años, por lo que se opone a “aquellas medidas que pueda interferir en esta formación y exigimos que se aprueba el nuevo programa de la especialidad, del que ya se aportaron alegaciones”.
La creación de la especialidad obliga al sistema de Formación Sanitaria Especializada (
FSE), según Semergen, a “replantearse la planificación y
distribución del número de plazas del próximo MIR con el objetivo de atender las necesidades del sistema. Solicitamos a los responsables que ponderen las necesidades tanto de la nueva especialidad como de Familia y que se tengan en cuenta este aspecto a la hora de sacar nuevas plazas para la convocatoria MIR de 2025, minimizando el aspecto negativo tanto en el número de plazas como en la elección de las mismas”.
Impacto de la especialidad de Urgencias en Familia
El problema, añade
Pilar Rodríguez Ledo, presidenta de SEMG, es que el
número de plazas MIR de Familia “no se ha controlado adecuadamente desde hace muchos años”. “Los puestos han de sacarse en base a las necesidades y previendo los efectos a largo plazo”, explica a
Redacción Médica la dirigente gallega, que entiende que a partir del próximo curso “habrá que añadir al cálculo a los
residentes de Urgencias y Emergencias”.
“Va a ser difícil, al menos al principio, pero lo que no se puede hacer es restar plazas a la Medicina de Familia por la creación de Urgencias incide. Sería el
trasvase de una especialidad a otra”.
Respecto al decreto aprobado por el Ejecutivo, Ledo hace una lectura positiva, aunque insiste en la necesidad de impulsar un nuevo
programa de la especialidad de Medicina de Familia “que está pendiente desde hace mucho tiempo”.
“Apoyamos a los compañeros de Urgencias, son socios nuestros, y todo lo que pueda ser bueno para ellos lo será también para nosotros”, apunta la presidenta de SEMG, quien reitera que estas decisiones “no pueden ir en detrimento” de una Medicina de Familia “que
ya lo tiene suficientemente difícil”.
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