Las sociedades médicas de Medicina de Familia
apoyan de manera extraordinaria y coyuntural que un residente de último año pase consulta en un centro de salud para
paliar las listas de espera que tiene a día de hoy la Atención Primaria. Pero, tanto la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (
Semergen) como la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (
SEMG) especifican que esa vía tiene varios condicionantes y que uno de ellos es que el propio residente
no puede tener la misma responsabilidad que el médico adjunto.
Esta valoración parte de la posición manifestada por la federación extremeña de Semergen, que ve con buenos ojos que
un residente de cuarto año pasara consulta de manera “extraordinaria”,
sin perjudicar su periodo formativo y tras pactar que siempre esté
tutorizado. Desde SEMG opinan que como “parche o medida paliativa momentánea” puede valer, pero que en ningún caso debe ser una solución, porque el residente estaría
adquiriendo una responsabilidad que “no tiene y no está contemplada”.
“Sería una medida exclusivamente paliativa que
en un momento determinado podría ser coyuntural, pero para nada es una medida que se establezca como solución”, critica
Lorenzo Armenteros, portavoz de SEMG. Añade, además, que no sería una salida para la situación de congestión en la que está inmersa la Atención Primaria en España. “No es lo más adecuado y
no se considera en ninguna otra especialidad. Además habría que regular muy bien esas condiciones en las que llegaría a trabajar esa persona”, recalca.
“Si es tutelado y entra dentro de la excepcionalidad,
puede ayudar a que se forme algo mejor. Puede ser una solución transitoria, pero siempre sin que se reduzca su periodo formativo”, detalla a este diario
José Polo, presidente de Semergen. No obstante, el portavoz de SEMG afirma que esa vía no le aportaría “absolutamente nada” a la formación del MIR. “Para eso que modifiquen el plan del médico de Familia y que lo reduzcan un año”, sentencia. Y añade que, actualmente,
un residente de cuarto año es tutorizado, pero sin atribuírsele la responsabilidad que requeriría pasar consulta.
“Con lo que se plantea en Extremadura el residente tendría casi el 90 por ciento de su formación cubierta y estaría tutelado como en las prácticas de sus últimos dos meses”, incide Polo. Por lo que desde Semergen apuntan a que el MIR de cuarto año estaría
“capacitado” para pasar consulta.
Vía extrapolable a otras CCAA
Polo abre la puerta a que en situaciones determinadas pueda ponerse a disposición de la Atención Primaria de cada región esta posibilidad, siempre y cuando se demuestre que se trata de una medida “eficaz”. “Podría ser una opción que se planteara a nivel del Consejo Interterritorial y
se aprobara para todo el Estado”, comenta el presidente de Semergen.
Sin embargo, desde la SEMG recalcan que lo que las autoridades deben hacer es ampliar el número de plazas en Medicina de Familia, ampliar la cantidad de tutores y mejorar en la calidad formativa: “Lo más importante es q
ue haya más plazas y que los médicos reciban la formación adecuada”. Así, cree Armenteros, harían de Familia
una especialidad más “atractiva”, y ayudaría en cierto modo a ‘descongestionar’ el primer nivel asistencial.
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