Lorenzo Armenteros, miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (
SEMG), se muestra pesimista con la
situación del Covid-19 en España. Considera que ante las desavenencias entre las distintas administraciones y la llegada de la
gripe y otras
enfermedades respiratorias estacionales, "cabe un
colapso" en el
sistema sanitario.
"El peligro existe, es una amenaza factible. Los datos son
alarmante: ocupamos los peores puestos internacionales. Y ante los
antecedentes de gestión de la pandemia, en la que siempre se han tomado decisiones por detrás de los acontecimientos, y la descoordinación entre gobierno central y autonómicos, con las luchas políticas estériles, nuestra confianza en las autoridades es muy baja. Así que cabe un
colapso si los casos de SARS-CoV-2 si se suman los casos de gripe y otras enfermedades respiratorias propia de la temporalidad", asegura.
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Todos estos argumentos, añade, les hacen ser pesimistas y ver ese "peligro de colapso como una dramática posibilidad" que desearían que "no ocurriese".
Para el médico de Familia, las medidas que deberían llevarse a cabo ahora para evitar que esta segunda ola sea tan agresiva como la primera "son aquellas que
epidemológicamente han resultado
efectivas, pero que en España no han conseguido desarrollarse de la forma que se tendría que haber realizado".
Sistema de rastreadores y refuerzo de Primaria
Por ejemplo "un
sistema de rastreadores ajustado a la incidencia de casos con el fin de evitar llegar a la transmisión comunitaria, si esta llega, el papel de los rastreadores en contribuir al control de casos es prácticamente inapreciable".
"Hay que hacer programas activos de concienciación a la población"
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También considera fundamental e
refuerzo de la Atención Primaria "para que se pueda dedicar todo el esfuerzo a labores asistenciales y preventivas,
eliminado todas aquellas de tipo burocrático que no aportan nada al proceso asistencial y ocupan un tiempo muy necesario que se precisa para la asistencia. También incrementando la capacidad resolutiva que permita diagnósticos diferenciales en un mismo acto clínico (diagnostico diferencial con gripe, virus respiratorio sincitial, disnea de origen cardiaco, etc)", explica.
Otra de las
medidas que considera efectivas son en la entrada de viajeros intencionales o nacionales, siempre mejor en origen con PCR o tests antigénicos, o "
programas activos de concienciación a la población. En este aspecto
han fallado las autoridades. De esta forma, las medidas se van relajando e incumpliendo porque no están interiorizadas en la población: se ha minimizado la información y no se le ha dado la importancia debida", asegura.
Añade las
medidas en el transporte para evitar masificación de viajeros a determinada horas, incremento de plazas y la frecuencia de los viaje, y h
orarios de entrada laboral diferentes, también con el objetivo de no sobrecargar.
Las restricciones, una medida preventiva
Sobre si aumentarán las restricciones en los próximos días en España, Armenteros considera que "la situación es
variable e
imprevisible". "De seguir el ritmo de crecimiento y sin descenso de la curva ascendente de caso no se puede descartar medidas mas restrictivas y que afecten a mas lugares en España, además de Madrid" asegura.
Con todo, considera que
no se va a regresar a los 'confinamientos duros' vividos durante el Estado de Alarma: "Esa decisión parece descartada por las autoridades políticas ante la grave crisis económica que generaría. En nuestra opinión nadie se atreverá a tomarla, salvo el caso extremo de una situación irrefrenable y de colapso sanitario. Pensamos que los confinamientos absolutos no se volverán a dar".
"Pensamos que los confinamientos absolutos no se volverán a dar"
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"Las restricciones son una
medida que se ha demostrado
eficaz -añade-. Hay que tomarla mejor de modo preventivo para evitar situaciones mas complejas. Lo que ocurre es que su aplicación y su cumplimento ha sido muy heterogéneo, dependiendo del momento y el lugar. Esto como consecuencia de no existir una política común y equitativa para todos los ciudadanos".
Sobre si ven positivo un sistema de fases como en la desescalada de mayo junio o son mejores las acciones puntuales como en esta segunda ola, explica que la desescalada ·fue realizada de un modo precipitado".
"Somos partidarios de
desecaladas mas lentas que aportan un mayor nivel de seguridad. Intereses, como no perder la oportunidad del
turismo y reactivar la
economía, hicieron precipitar las fases el la desescalada previa. Consideramos que esto es también una de las causas de la situación que vivimos en este momento", señala.
"Aunque se denominan con diferente nombre las medidas actuales son coincidentes con las fase de desescalada y están basada en ellas, las podemos considerar igual. En resumen, acciones o fases de desecalado lento", concluye.
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