El año 2017 ha arrancado como el año de la reactivación de numerosas infraestructuras sanitarias que se vieron paralizadas durante los años de dura crisis económica.
Extremadura, Aragón, Comunidad Valenciana, los dos archipiélagos y ambas Castillas protagonizan la construcción de nuevos hospitales cuyas obras se vieron aplazadas hace un lustro. Algunas de ellas, como la del
nuevo Hospital de Toledo son proyectos de gran tamaño y, entre todas, suman una inversión cercana a los
707 millones de euros.
Castilla-La Mancha es la región que dejó más infraestructuras en suspenso durante la legislatura más dura de la crisis económica (2011-2015), en concreto los nuevos hospitales de
Cuenca y
Toledo quedaron a medio construir y los de
Albacete y
Puertollano quedaron aplazados. Con la llegada de la aún tímida recuperación económica, el Gobierno de
Emiliano García-Page se propuso como una de sus principales metas reactivar estas obras, pero solo la del Hospital de Toledo –la más cara y compleja de todas– está encarrilada.
La negativa de Podemos a validar los Presupuestos para 2017 en las Cortes regionales el pasado viernes 7 de abril ha dejado sin la financiación prevista los trabajos en
Cuenca, Albacete y Puertollano, según ha detallado el consejero de Sanidad,
Jesús Fernández, visiblemente molesto y decepcionado con el asunto. En el caso de
Toledo, las obras se han salvado gracias al modelo elegido, el de concesión.
La
construcción en el nuevo hospital de Toledo se reanuda este mes –después de un año de labores menores de acondicionamiento, mientras llegaba el
proyecto definitivo y la
licencia de obra– y están presupuestados en
310 millones de euros. No se empezarán a pagar hasta que la empresa no entregue la obra, lo que está previsto para mediados de 2019, a través de un
canon anual de 60 millones. Cuando se termine, este hospital será el más grande de todos los que se construyen actualmente, ya que tendrá más de
800 camas.
Castilla y León
En Castilla y León, las obras del
nuevo Hospital de Salamanca, cuya culminación estaba prevista en principio para 2013 se reactivaron con fuerza durante el pasado año y la fecha definitiva para su terminación está programada para 2019. El presupuesto total de este nuevo hospital es de
202 millones de euros. Para concluirlo, la Junta presupuestó 33,8 millones de euros en 2016 y otros 37 millones en los presupuestos de 2017. Para 2018, está prevista una cantidad similar y aún quedan 43 millones de euros más que podrían presupuestarse en 2019.
Durante los primeros meses de este año también se ha desatascado la situación del
nuevo Hospital de Palencia, cuyas obras
se prevé que comiencen este verano. “Hemos tenido que ajustar características del proyecto de construcción a las de los edificios antiguos y eso nos ha demorado”, explicó el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado. El Gobierno regional ha presupuestado 47 millones de euros para la primera fase de este hospital, cuyas obras se prevé que estén terminadas en 2020. El centro contará con más de 495 camas.
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Casi la mitad del gasto en obras públicas dedicadas a equipamiento social en lo que va de año ha ido destinado a infraestructuras sanitarias. Así se desprende del último informe de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarios de Infraestructuras (Seopan), que apunta a que entre enero y febrero de 2017 ha aumentado más de un 900%, frente a los 12,5 millones de euros destinados en 2016. En lo que va de año, el importe destinado a infraestructuras sanitarias es de 126 millones de euros, de los cuales 96 millones son para obra nueva y 29 millones rehabilitación. En el primer caso, se trata de 95 millones de euros más que lo gastado en el mismo periodo de 2016, un incremento apabullante, superior al 5000%.
Extremadura
En Extremadura, los trabajos del
Hospital de Cáceres, retomados en los últimos meses, han cogido buen ritmo y
ya ha comenzado el montaje de los quirófanos. Las obras se vieron paralizadas en 2013 “por motivos ajenos al Servicio Extremeño de Salud (SES)”, debido a que, a juicio de la Administración, la adjudicataria estaba incumpliendo el contrato.
A la paralización le siguió un periplo judicial que duró
tres años. Con las obras por fin encarriladas, está previsto que la primera fase del hospital –con un presupuesto de 13 millones de euros y 206 camas– abra a finales de 2017. Este asunto ha provocado una fricción entre la Consejería y el
Colegio de Médicos de Cáceres, que preferiría que el nuevo hospital abriese de una vez y no por fases.
Aragón y Comunidad Valenciana
En
Aragón, la construcción del nuevo
Hospital de Alcañiz ha tenido un papel central en la
negociación de los presupuestos entre el Gobierno socialista y el Grupo de Podemos en el Parlamento. El líder de esta formación en la región,
Pablo Echenique ha hecho bandera de este asunto y el consejero,
Sebastián Celaya, ha cogido el guante. Si no hay espantada de última hora como en el caso de Castilla-La Mancha, este año habrá financiación para que arranquen las obras de un centro con 194 camas y presupuestado en 96 millones de euros.
Por otro lado, en la
Comunidad Valenciana, aunque el Gobierno regional está más ocupado en absorber hospitales bajo su gestión directa que en la construcción de nuevos centros, se ha destinado recientemente
una partida de 900.000 euros para la redacción del proyecto definitivo del nuevo
Hospital de Ontinyent, un proyecto que la crisis dejó aparcado durante la anterior legislatura y que ahora cuenta con una fecha de inauguración prevista para 2021.
Andalucía, Canarias y Baleares
En
Andalucía, donde se consiguió ejecutar la obra del nuevo Hospital del Campus de la Salud de Granada en plena crisis económica e inaugurarlo hace un año, las obras pendientes son de menor calado. En las últimas semanas se ha reactivado la construcción del
Centro de Alta Resolución de Estepona (Málaga), con un presupuesto de unos 17 millones de euros.
Similar situación se da en Canarias, donde la segunda fase de las obras del
Hospital del Sur de Tenerife encallaron a mediados del año pasado, cuando la constructora Sacyr exigió un modificado de un 10% del presupuesto para seguir adelante y el Gobierno amenazó con resolver el contrato por incumplimiento. El nuevo consejero,
José Manuel Baltar, ha logrado reactivar los trabajos, ajustados al presupuesto inicial de 7,4 millones, por lo que se espera que este hospital de 96 camas pueda estar terminado en año y medio.
En Baleares, después de ponerse en marcha el
nuevo Hospital de Ibiza y del consecuente traslado, ha quedado una asignatura pendiente. Se trata de la reconversión del
Antiguo Hospital de Can Misses en un centro de salud y una residencia para profesionales desplazados. Este proyecto tiene un presupuesto de 2,4 millones de euros y podría estar listo a finales de año.
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