La
participación de los ingenieros en el funcionamiento del Sistema Nacional de Salud (SNS) se ha convertido en una necesidad que cada vez respaldan más dirigentes públicos. La gestión diaria de un hospital ha abierto las puertas a diferentes disciplinas de profesionales, desde los expertos en
Biomedicina hasta los
analistas de datos o los ingenieros industriales para la
gestión de procesos, para que se hagan un hueco en las planificaciones del futuro. Sus virtudes no han pasado desapercibidas en el congreso
Hospitales disruptivos. Reingeniería de la sanidad, que ha permitido mostrar una radiografía sobre el estado del sector.
El consejero de Digitalización de la Comunidad de Madrid,
Miguel López-Valverde, ha sido uno de los defensores de este perfil laboral que considera
“fundamental” para trabajar en tándem con el resto de especialistas asistenciales.
“Hay que crear categorías de todas las ramas de ingeniero y que tengan la misma carrera profesional que un médico”, ha enfatizado en la jornada que organiza la Comisión de Ingeniería Médica del Colegio de Ingenieros Industriales de Madrid (COIIM) y Asociación de Ingenieros Industriales de Madrid.
El nuevo titular de la cartera ha enfatizado la importancia de estos expertos en un momento en el que el modelo de atención requiere una
“optimización de recursos y gestión de la demanda” que exige este tipo de formación académica. “Esta transformación ya ha ocurrido en otros sectores como el industrial que lleva mucho trabajando en esto”, ha apostillado.
López-Valverde ha apuntado a que ese es el camino para conseguir
“modelos sostenibles”, en los que la tecnología ayude a conseguir nuevos hitos médicos. Los
anillos diagnósticos, los hospitales sin paredes, la inteligencia artificial o la sanidad 5.0 son algunas de las apuestas que confía en implementar desde la Consejería, a la par que se reduce la carga burocrática de los facultativos
. “Tenemos que ir a un modelo de integración completa de toda la información en todos los circuitos asistenciales”, ha subrayado.
El consejero de Digitalización de la Comunidad de Madrid, Miguel López-Valverde.
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El consejero ha cogido el guante del mensaje lanzado por el presidente de la Comisión de Ingeniería Médica y Sanitaria del Colegio,
Juan José Pérez, quien ha hecho un llamamiento para
mejorar la contratación de estos perfiles en las comunidades autónomas y dejar atrás la “politización” de la sanidad. Mientras que ha defendido la importancia de que estos nuevos profesionales lideren un cambio en la sanidad hacia un modelo donde se optimicen todos los procesos.
Pérez: "Hay que tratar los datos con la misma delicadeza que a un paciente en un hospital"
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El experto ya anticipado que los avances científicos encaminan el modelo sanitario hacia un sistema en el que
“probablemente” acabará habiendo más ingenieros que médicos en los hospitales del Sistema Nacional de Salud (SNS) debido a las ventajas que ofrece la tecnología. “Estoy seguro de que en los próximos años habrá cambios significativos en los pacientes”, ha subrayado.
Los hospitales sin paredes
Sus intervenciones han sido el colofón de una jornada de intercambio de opiniones en las que se han podido presentar algunos de los proyectos de hospitales disruptivos con mayor impacto de España. Algunos de ellos se han bautizado como
hospitales sin paredes o líquidos, ya que han conseguido que a través de la tecnología se pueda acercar la asistencia sanitaria hasta los hogares, poniendo fin a las
limitaciones físicas de acudir siempre al centro.
María del Olmo, gerente de los hospitales universitarios Rey Juan Carlos, Infanta Elena y General Villalba ha presentado precisamente este ejemplo. En los tres puntos han desarrollado herramientas como
servicios no presenciales, videos explicativos, diálogos web, planes de citas, consejos personalizados, chatbots, videonconsultas o autorregistros que caminan en esa dirección. “Tenemos que elegir siempre muy bien el proceso, el perfil del paciente y el momento”, ha detallado.
“Cuando pensamos en los procesos asistenciales lo que hacemos es parcelarlo.
Qué puedo aportar antes, durante y después al paciente. Esto me permite que el hospital no está delimitado a cuatro paredes”, ha argumentado la portavoz de estos centros, que ya han atendido por este
circuito a más de 68.000 personas.
Marta del Olmo Rodríguez, gerente de los hospitales universitarios Rey Juan Carlos, Infanta Elena y General de Villalba, y directora del Servicio de Experiencia de Paciente de los Hospitales de Quirónsalud integrados en el Sermas.
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Un caso muy parecido es el del
Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, que también ha profundizado en el concepto de hospital líquido. Esta fórmula les ha permitido acercar la
atención a las familias de los pacientes pediátricos o reducir las visitas innecesarias, gracias a una plataforma bautizada como Cortex.
“La percepción del gerente era que cuando nos llamen por el canal que sea, sepamos rápidamente quién es, cuál es su necesidad, y que
la respuesta sea la misma, independientemente de quién le atienda y de cuál sea el canal”, ha detallado
Hernán Elías, el responsable de Proyectos del centro, que también ha participado en otras iniciativas de gestión de procesos de las urgencias.
Elías Lew, responsable de proyectos de Transformación Digital. Adjunto a la Dirección Médica. Hospital Sant Joan de Déu.
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La telemedicina, una vieja conocida de las Fuerzas Armadas
Esta idea de llevar la atención fuera del hospital encaja perfectamente con el paradigma de la telemedicina. Aunque esta práctica haya obtenido un gran protagonismo con la pandemia de Covid-19, sus primeros pasos ya se asentaron gracias a la experiencia de las
Fuerzas Armadas, que requieren de esta tecnología para sus operaciones en el extranjero. Defensa lleva colaborando desde hace un cuarto de siglo con
Comitas eHealth precisamente para lograrlo.
Esta sinergia ha permitido alcanzar un punto en el que actualmente los equipos militares ya pueden contar con
una maleta que integra con conexión por satélite y que cuenta con la tecnología sanitaria necesaria para realizar una asistencia, en contacto telemático con un especialista. “En 27 años la telemedicina ha pasado de ofrecer u servicio prioritariamente logístico-operativo a un servicio integral que implica f
unciones asistenciales, de docencia, investigación, consultoría o medicina pericial”, ha explicado el coronel
Fernando Juste.
Fernando Juste, excoordinador de logística sanitaria del Ejército del Aire.
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Aquilino Antuña, CEO de Comitas eHealth.
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El éxito de la nueva impresión 3D
Buena parte de la revolución tecnológica también pasa por los avances en la mejora del
modelado 3D que han permitido que el
Hospital Gregorio Marañón se convierta en una referencia internacional por su capacidad para producir sus propios productos médicos. Una ventaja no solo de cara a realizar implantes, sino también para
planificar cirugías, ya sea física o virtualmente con réplicas obtenidas tras realizar las pruebas de imagen radiológica.
Rubén Pérez, traumatólogo y coordinador de la Unidad UPAM3D, ha explicado algunas de las virtudes de estos avances que han permitido cambiar el paradigma de lo que es un hospital. “
Hemos recuperado el concepto de hospital fabricante, en el que se puede integrar 100 por ciento el proceso con un control de la calidad y acompañamiento”, ha apuntado el especialista.
La
reducción de los tiempos, el conocimiento en equipo, la mejora de los resultados clínicos o la escalabilidad son algunos de los beneficios que presenta esta nueva forma de trabajo, que comenzó en 2014 con una rudimentaria impresora pero que ya se ha ido perfeccionando.
“Somos el hospital que está cambiando el paradigma del point of care”, ha agregado.
Rubén Pérez Mañanes, cirujano Ortopédico Oncológico y Traumatólogo y coordinador de la Unidad UPAM3D en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón.
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La optimización de recursos, clave en el hospital
Sin embargo, todos estos avances no serían posibles si no se logran canalizar correctamente los procesos de un hospital. De ahí, que nuevas fórmulas de organización como
la metodología Lean se hayan convertido en la hoja de ruta a seguir en algunos centros.
María Gutiérrez San Miguel es la coordinadora de la Unidad de Procesos Hospitalarios Avanzados del
Vall d’Hebron y responsable en gran medida de estos resultados.
Su departamento ha identificado que hasta un
55 por ciento de las actividades del hospital se encuadran bajo la etiqueta de “no valor”, por lo que han diseñado diferentes métodos para tratar de optimizar mejor el tiempo y de conseguir un “cambio cultural” sobre el manejo de los procesos. Las excesivas horas para
dar de alta a un paciente, la reposición de
los carros de Enfermería o el área de farmacia son algunas de las secciones en las que han resultado exitosos estos cambios. “En toda la gestión por procesos tiene mucho sentido la integración de los ingenieros”, ha defendido.
María Gutiérrez-San Miguel Guilera, coordinadora de la Unidad de Procesos Hospitalarios Avanzados. Hospital Vall d´Hebrón.
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Este tipo de prácticas también se han extendido fuera de los propios hospitales.
Cofares, el principal suministrador de medicamentos de las farmacias y centros sanitarios del SNS, también aplica metodologías similares para hacer más eficientes las cerca de
45.000 entregas que realizan cada día.
La optimización de los flujos de trabajo les ha permitido aplicar
un nuevo sistema de ventanilla única, en el que la farmacia tenga un solo interlocutor y haga un pedido al día. Así es posible hacer más eficiente la logística y evitar las devoluciones, caducidades o pérdidas. “Existen capacidades, experiencias.
Liberemos esos recursos sanitarios de todo ese trabajo de poco valor añadido. Dejemos a los ingenieros hacer su trabajo”, ha concluido
Rubén Orquín, director de Supply Chain, Operations & Logistics.
Rubén Orquín Casas, director Supply Chain, Operations & Logistics en Cofares.
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Manuel Martínez-Selles, presidente del Colegio de Médicos de Madrid.
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Marta del Olmo Rodríguez, Hernán Elías Lew, Aquilino Antuña, Fernando Juste y Rubén Orquín Casas.
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Un instante durante la presentación de la ponencia "Hospitales Sin Paredes".
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