Tratar de forma precoz la infección fúngica disminuye su mortalidad

Expertos analizan, en una jornada de Gilead, cómo ha afectado la pandemia de Covid-19 al manejo de estos pacientes

Jesús Fortún, coordinador de las jornadas y jefe de Sección de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal de Madrid.

04 mar 2021. 13.00H
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La mortalidad asociada a las infecciones fúngicas es bastante elevada, siendo el tratamiento precoz uno de los factores que conduce a mejores tasas de supervivencia en comparación con el tratamiento tardío. Para debatir sobre los aspectos más novedosos en el campo de la prevención y el manejo de la infección fúngica diseminada en determinados tipos de enfermos, no solo pacientes hemato-oncológico, sino otros en los que se ha detectado un incremento en la incidencia de infección fúngica invasora, Gilead ha organizado las jornadas “ATICO Antifúngicos: Temas de Interés y Casos clínicos”, que nacen con el objetivo de acercar los conocimientos más actuales de la infección tanto a médicos en formación como a especialistas en enfermedades infecciosas, hematólogos o intensivistas, entre otros.

Durante la primera de esta serie de reuniones formativas, Jesús Fortún, coordinador de las jornadas y jefe de Sección de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid, expuso un tema de interés como es la dificultad en el manejo adecuado de la peritonitis candidiásica, una forma de infección fúngica grave y frecuente que afecta especialmente a pacientes intervenidos de cirugía abdominal. Fortún revisó aspectos epidemiológicos, clínicos y farmacocinéticos de las candidiasis invasoras, poniendo de relevancia que para la cándida es importante el tratamiento precoz. “En las UVI hay mucho consumo de antifúngicos en base al tratamiento empírico porque el diagnóstico es bastante limitado. Los especialistas debemos evaluar cuáles son las opciones diagnósticas y su fiabilidad para dar un tratamiento correcto”.


El Covid-19 afecta a las enfermedades fúngicas


Además, Fortún apuntó que “el Covid-19 ha afectado a las enfermedades fúngicas, sobre todo al aspergillus en las UVI. Las obras en los hospitales o el trasiego de pacientes hacen que haya contaminación y colonización lo que trae como consecuencia que se esté sobrediagnosticando a los enfermos. Los pacientes Covid son intubados y no es fácil diferenciar cuál tiene una infección invasiva por aspergillus y cuál una colonización”.

Patricia Muñoz, del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, abordó también el riesgo de estas infecciones en pacientes que han sufrido virus respiratorios, como la gripe o el SARS-CoV-2, e hizo una puesta al día sobre cuál es el riesgo real de sufrir una infección fúngica en pacientes con Covid-19.

Esta primera reunión se complementó con la presentación de dos casos clínicos. El primero de ellos fue a cargo de Ana Fernández, del Hospital Universitario Puerta de Hierro, quien, a través de una experiencia concreta, actualizó el tratamiento de la criptococosis disemina, una forma especialmente grave y con manifestaciones clínicamente variadas de infección fúngica invasora. Por su parte, Juan Carlos Ramos, del Hospital Universitario La Paz, dedicó su presentación a comentar las novedades en el tratamiento de la infección por mucorales, un hongo muy agresivo para los pacientes, haciendo hincapié en la importancia de la profilaxis antifúngica en los pacientes de riesgo y el tratamiento combinado antifúngico y quirúrgico.

Así lo explicó José María Aguado, coordinador de las jornadas, catedrático de Medicina y jefe de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario 12 de Octubre en Madrid, “han sido muchos los avances en el campo del tratamiento con antifúngicos a lo largo de los años y han aparecido fármacos completamente novedosos en su mecanismo de acción y otros más potentes y con menos efectos secundarios. Para cualquier médico dedicado al cuidado de personas inmunosuprimidas es imprescindible la comprensión profunda de las enfermedades fúngicas invasoras. Un mayor conocimiento en este terreno nos ayudará a mejorar la prevención y tratamiento de estas complicaciones en nuestros pacientes”.


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