Después de lograr un drástico
recorte del gasto farmacéutico durante la pasada legislatura, parar el crecimiento y seguir tratando de reducir la inversión pública de medicamentos permanece entre los objetivos de
Mariano Rajoy para los próximos años.
Así lo indica la última actualización del
Programa de Estabilidad 2017/2020, el documento en el que el Gobierno introduce sus compromisos para
contener el déficit y no superar los límites de gasto comprometidos con la Comisión Europea.
De nuevo, varias medidas se concentran en el gasto farmacéutico. Cómo ya contó Redacción Médica el año pasado,
España prevé reducir en esta partida unos
550 millones de euros en 2017, aunque el alcance de las iniciativas gubernamentales llegará hasta, al menos,
2018 y 2019.
De hecho, para el próximo año
el Gobierno prevé ahorrar unos 400 millones de euros “atendiendo al conjunto de medidas de eficiencia y compromisos incorporados en el Convenio de Colaboración suscrito con la industria farmacéutica”, es decir, mediante el
acuerdo firmado con
Farmaindustria en diciembre de 2016. A pesar de que el pacto solo tendría validez en 2017 (su periodicidad es anual), está claro que el ejecutivo da por hecho que
se renovará de cara a 2018.
Al ahorro citado hay que sumar el que se prevé conseguir gracias a
la compra centralizada de medicamentos, valorado en unos 100 millones. Es decir, que para 2018 el gobierno de Mariano Rajoy espera poder sacar del medicamento público
unos 500 millones.
Además,
el documento adelanta que el ahorro de 100 millones por compra centralizada también se produciría en 2019.
Saldo tras la reforma sanitaria
El documento recoge además el
saldo dejado tras la puesta en marcha de diferentes medidas en el gasto sanitario y el farmacéutico. Entre 1 de julio de 2012 y 31 de diciembre de 2016 se ha recortado unos
11.282,2 millones de estas partidas, aunque más de la mitad corresponde al ámbito del medicamento.
Por otro lado, también se recogen algunos de los compromisos pactados para el presente año, como el documento de consenso en el que están trabajando Administraciones Públicas y sindicatos para
reducir la tasa de temporalidad en el Sistema Nacional de Salud del 30 por ciento actual a un 10 o un 8 por ciento en un plazo de tres años, “previa aprobación de una oferta de empleo público global en el sector sanitario, con una tasa de reposición del cien por cien”.
Acceda a la actualización del Programa de Estabilidad
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