Nervios en Grifols: la empresa pasa de padre a hijo

Después de que la compañía anunciara el traslado de su tesorería a Irlanda

Lunes, 14 de diciembre de 2015, a las 12:34
Redacción. Madrid
El Consejo de Administración de Grifols ha aprobado el ‘plan de sucesión’ propuesto por Víctor Grifols, actual presidente y consejero delegado de la compañía, por el que sus responsabilidades ejecutivos quedarán traspasadas a su hijo (Víctor Grifols Deu) y su hermano (Raimon Grifols) a partir  de 2017.
 

Víctor Grifols.

Ambos estarán bajo la figura de consejeros delegados solidarios, mientras que Víctor Grifols permanecerá en el Consejo de Administración como presidente no ejecutivo, estableciéndose 2016 como un periodo de transición para que el relevo se produzca “de forma ordenada y conforme a la planificación prevista”.
 
Este cambio llega en un momento delicado para la compañía, en el que la inquietud domina a sus inversores. En la segunda mitad de octubre, la compañía anunció la apertura de unas nuevas instalaciones en Irlanda, operación con la que se ratificaba la apuesta de esta compañía por la baja fiscalidad irlandesa, donde la compañía tiene ya tres cuartas partes de su negocio por motivos tributarios y regulatorios, incluida su tesorería.
 
Este movimiento ha sido fuertemente criticado tanto desde España como desde Cataluña, región en la que Víctor Grifols ha estado en el centro de la polémica por su apoyo al movimiento independentista liderado por Artur Mas, de quien es amigo personal y sobre cuyo ‘fichaje’ para la compañía que preside se llegó a rumorear durante las elecciones autonómicas del pasado mes de septiembre.
 
Momento de ceder

 
Ya sea por esta implicación política o por otras circunstancias, Víctor Grifols considera que “ha llegado el momento de ceder la responsabilidad ejecutiva de Grifols a una nueva generación muy bien preparada y capaz de dirigir la compañía hasta niveles tan altos como los logrados desde 1987 hasta hoy. Estoy tranquilo porque he depositado mi confianza en los mejores candidatos. Ambos conocen la compañía tanto o mejor que yo, y su juventud y preparación profesional son un valor añadido para afrontar los retos futuros de Grifols. Pero no me retiro totalmente de la empresa. Desde mis funciones como presidente no ejecutivo del consejo de administración seguirán contando con todo mi apoyo, conocimiento y experiencia”.

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