Las
falsificaciones producen
pérdidas de alrededor de
500 millones de euros al sector de los productos farmacéuticos en España, y de unos 6.000 millones en toda Europa. Así lo detalla un nuevo
informe publicado hoy por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (Euipo).
En 2016, el comercio internacional de productos farmacéuticos falsificados alcanzó los
4.000 millones de euros, una cifra que, como se ha mencionado antes, se ha
incrementado hasta llegar a los
6.000 millones en toda Europa.
La
Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la proporción de falsificaciones (incluidos los de mala calidad) en el mercado oscila entre más del
10 por ciento de las ventas totales.
Países de procedencia
China, Hong Kong, India y Singapur son las principales economías de
procedencia de los medicamentos falsificados. Mientras que China e India son los principales productores de medicamentos falsos, Hong Kong, Singapur y los EAU sirven como economías de tránsito. Otros puntos de tránsito relevantes para productos farmacéuticos falsos son
Irán y Yemen.
En el período 2014-2016, las falsificaciones incautadas incluyeron medicamentos para
enfermedades graves, incluida la malaria, VIH / SIDA y cáncer. También se incluyeron antibióticos, tratamientos de estilo de vida, analgésicos, tratamientos para la diabetes y medicamentos del sistema nervioso central.
¿Cómo llegan los medicamentos falsos?
El comercio de medicamentos falsificados también se ha visto facilitado por el gran crecimiento que ha tenido el uso de
paquetes pequeños. De hecho, según se desprende del informe, más del 95 por ciento de las incautaciones aduaneras de productos farmacéuticos en 2014-2016 fueron
a través de servicios de correo postal.
Estos envíos también representaron la mayor parte del valor total de las incautaciones, siendo del
51 por ciento. Los productos farmacéuticos son la única categoría de falsificaciones en las que las pequeñas parcelas representan la mayoría de las incautaciones y del valor incautado.
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