Ainara Vallés.Madrid
“Cuando creíamos que teníamos todas las respuestas, de pronto, cambiaron todas las preguntas”. Con esta frase del conocido escritor Mario Benedetti , Amós García Rojas, presidente de la Sociedad Española de Vacunación (AEV), quiso poner de manifiesto la necesidad de concienciar a la población adulta de que “las vacunas no son solo cosa de niños” y que todos los ciudadanos son vulnerables ante las enfermedades.
El encuentro ha tenido lugar en el marco de la Semana Mundial de la Vacunación, con motivo de la cual el laboratorio Pfizer organizó un coloquio del que también fue parte Esther Redondo, coordinadora nacional del Grupo de Trabajo de Actividades Preventivas de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), quien, en la misma línea, ahondó en la necesidad de que se aumenten las tasas de cobertura vacunal y se trabaje en la actualización del calendario adulto.
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), el motivo fundamental por el que los adultos prescinden de la vacunación es precisamente el éxito de los programas llevados a cabo, que han logrado reducir de forma tan clara la presencia de enfermedades que los ciudadanos han acabado por temer más a las vacunas que a las propias patologías.
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De izq. a dcha: Amós García, presidente de la AEV, Cristina Méndez, directora médica del área de vacunas de Pfizer y Esther Redondo, coordinadora de Semergen.
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Por su parte, en la línea de las recomendaciones hechas por la OMS a los Estados que integran el Plan de Acción Europeo de Vacunas, Redondo ha recordado que la vacunación “es un derecho” y que los gobiernos deben comprometerse con los problemas de inmunización, lo que no solo significará mayor equidad, sino que además será beneficioso para las cuentas públicas: “Cualquier inversión en vacunas en materia pública es recuperable con creces”, ha asegurado.
El papel de los profesionales médicos
Ambos profesionales han sido enfáticos en señalar que son los médicos quienes deben adoptar el papel proactivo que les corresponde a la hora de recomendar a sus pacientes que inviertan en su calidad de vida a través de la vacunación.
En este sentido y para tal fin, Redondo ha aseverado que “sería fundamental trabajar en una actualización del calendario vacunal del adulto, que defina perfiles de pacientes para los que se priorizase un programa sistemático de vacunaciones”.
La gripe y el neumococo, las vacunas principales
Especial hincapié se ha hecho en la importancia de administrar las vacunas contra la gripe y la enfermedad neumocócica a la población adulta, “especialmente por la importante carga de morbilidad y mortalidad que suponen estas dos enfermedades” ha aseverado Redondo, quien además ha puntualizado que en España se producen alrededor de 114.000 casos de neumonía al año, de los cuales el 41,5 por ciento amerita hospitalización.
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