La Aemps actuará como ente 'inspector' independiente en la farmacia estatal

La creación de una sociedad público-privada para acelerar la producción de medicamentos es uno de los planes 'estrella' del Gobierno. El proyecto es lograr una farmacia estatal que se ceñirá a las terapias avanzadas, que en su mayoría provienen de instituciones académicas y que, al final del proceso, tienen que someterse a los mismos procedimientos regulatorios que los fármacos de fabricación industrial. En ella, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) intervendrá como un ente 'inspector' con la máxima independiencia y objetividad.

Este proyecto busca facilitar el desarrollo conjunto de terapias avanzadas, génicas y celulares, ingeniería tisular o medicamentos que, por sus características, requieren un proceso de creación y de fabricación muy singular, tal y como explicó a Redacción Médica Raquel Yotti, la nueva comisionada del Perte de Salud de Vanguardia. Y es que esta farmacia estatal se enmarca dentro del Perte.

¿Cómo trabajará la Aemps en esta nueva farmacia estatal? La Agencia explica a este medio que actuará como el regulador farmacéutico que es y, por tanto, deberá ser "independendiente y objetiva" en esta compleja labor. 

Cabe destacar que las terapias avanzadas son siempre de autorización centralizada, es decir, se realizan en el marco europeo de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA). De esta forma, el trabajo de la Aemps será el de intervenir como regulador autorizando los ensayos clínicos e inspeccionando las normas de correcta fabricación y las instalaciones para que todo sea óptimo.

¿Cuando verá la luz la farmacia estatal?

Tal y como publicó este medio, desde el Ministerio de Ciencia (principal coordinador del proyecto junto al de Sanidad) ya han hecho conjeturas de cuándo pondría ver la luz esta herramienta farmacéutica. Si todo avanza según lo planeado, podría conformarse durante el primer trimestre de este año 2024.

La propia Yotti ha reconocido que quedan “pocos elementos”, sobre todo trámites administrativos, para terminar de configurar la sociedad, y no descarta que el proyecto pueda ver la luz antes de abril.

Y es que la idea de desarrollar una compañía farmacéutica de naturaleza pública sobrevuela al Ministerio de Sanidad desde que Mónica García recogió la cartera. De hecho, en el programa electoral de Sumar ya se hacía mención a esta compañía destinada a fabricar y comercializar medicamentos, terapias esenciales y vacunas e “independizar” al sistema sanitario de la industria farmacéutica.

“Una empresa pública farmacéutica no solo para fabricar lo que ya no es rentable para la industria, sino para impulsar I+D+i pública, presionar para bajar precios, generar otros modelos productivos y aumentar respuesta frente a desabastecimientos”, sostienen.