Janssen, de Johnson&Johnson, ha hecho públicos
nuevos análisis del estudio de fase 3 MAIA sobre Darzalex (daratumumab) en combinación con lenalidomida y dexametasona (D-Rd), que
evalúa la supervivencia libre de progresión (SLP), la tasa de enfermedad mínima residual negativa (EMR), la tasa de respuesta global (TRG) con una mediana de seguimiento de 64,5 meses y la supervivencia global (SG) con una mediana de seguimiento de 73,6 meses en pacientes con
mieloma múltiple de nuevo diagnóstico no candidatos a trasplante, independientemente de la edad de los pacientes y en los distintos subgrupos clínicamente relevantes, así como la calidad de vida relacionada con la salud (CdVRS) en pacientes frágiles no candidatos a trasplante. Estos resultados se han presentado en comunicaciones orales y pósteres en el congreso anual de 2022 de la Sociedad Americana de Hematología (
ASH por sus siglas en inglés), que ha tenido lugar en Nueva Orleans (EEUU). Refuerzan, así, los datos anteriores del estudio MAIA sobre sus resultados clínicamente relevantes y poblaciones de pacientes, según la nota de prensa de Janssen.
“El tratamiento del mieloma múltiple se hace más complejo con cada recaída, por lo que es esencial que el tratamiento de primera línea alcance respuestas profundas y se prolongue así la supervivencia”, ha señalado
Edmond Chan, director senior para EMEA del área terapéutica de Hematología de Janssen-Cilag Limited. “Este año en ASH, 168 presentaciones orales y pósteres incluyen a
daratumumab, lo que demuestra su importancia en el paradigma del
tratamiento del mieloma múltiple. Los últimos resultados del estudio MAIA son alentadores y refuerzan el beneficio para la supervivencia global presentado anteriormente de este régimen basado en daratumumab como tratamiento de referencia para los pacientes no candidatos a trasplante”, añade.
“Los datos iniciales del estudio MAIA fueron decisivos para establecer el
régimen D-Rd como un tratamiento de referencia para los pacientes con mieloma múltiple de nuevo diagnóstico y no candidatos a trasplante”, ha señalado
Shaji Kumar, autor del estudio y consultor de la división de Hematología del departamento de Medicina Interna de la Clínica Mayo. “Estos resultados actualizados siguen reforzando el beneficio sobre la supervivencia global del régimen D-Rd y aportan importantes conocimientos sobre poblaciones de pacientes clave con diferentes edades y niveles de riesgo citogenético”.
Un análisis actualizado de la eficacia del estudio MAIA ofrece datos tras una mediana de seguimiento de
64,5 y 73,6 meses sobre el criterio de valoración principal del estudio, la
SLP, y los criterios de valoración secundarios de negatividad de la EMR, la TRG y la SG. Otros nuevos análisis post hoc informan sobre
subgrupos esenciales, como los grupos por edad y por
factores de riesgo citogenético, incluida la ganancia y amplificación del 1q (Gain 1q21 y Amp 1q21).
Daratumumab, fundamental en el tratamiento
“Los regímenes de combinaciones que incluyen daratumumab son fundamentales en el tratamiento del mieloma múltiple de nuevo diagnóstico y los datos presentados en ASH proporcionan
más información sobre el tratamiento de los pacientes no candidatos a trasplante con el régimen D-Rd en el ámbito de la primera línea”, ha declarado
Mark Wildgust, vicepresidente de Asuntos Médicos Globales de Janssen Research & Development, LLC. “Partiendo del profundo legado de Janssen en el tratamiento del mieloma múltiple, seguimos comprometidos con la evaluación de todo el potencial de daratumumab en combinación con lenalidomida y dexametasona para intentar satisfacer las necesidades específicas de distintas poblaciones de pacientes”.
La mediana de edad de los 737 pacientes incluidos en el ensayo MAIA fue de 73 años (intervalo de 45 a 90), con un 44 por ciento de participantes mayores de 75 años. Los resultados del análisis post hoc de los subgrupos fue coherente con los datos ya conocidos del estudio MAIA sobre la edad y mostraron que
D-Rd mejoró la SG, la SLP, la tasa de EMR negativa y la TRG en comparación con Rd solo en los tres grupos de edad estudiados, que incluyen a los pacientes menores de 70 años, los de entre 70 y 75 años y los menores de 75 años.
Datos del estudio
En los pacientes menores de 75 años (D-Rd, n=208; Rd, n=208) que fueron tratados con DRd,
la mediana de la SLP no se alcanzó frente a los 37,5 meses del grupo de Rd (Hazard Ratio [HR]: 0,52, Intervalo de Confianza [IC] del 95 por ciento, 0,39-0,68). La tasa de EMR negativa fue del 36,1 por ciento frente al 12,0 por ciento (odds ratio [OR], 4,13; IC del 95 por ciento, 2,49-6,84). La TRG fue del 95,2 por ciento frente al 81,7 por ciento.
En los pacientes menores de 70 años (D-Rd, n=78; Rd, n=77) que fueron tratados con D- Rd,
la mediana de la SLP no se alcanzó frente a los 39,2 meses del grupo de Rd (HR, 0,35; IC del 95 por ciento, 0,21-0,56). La tasa de EMR negativa fue del 35,9 por ciento frente al 11,7 por ciento (OR, 4,23; IC del 95 por ciento, 1,84-9,75). La TRG fue del 93,6 por ciento frente al 80,5 por ciento.
Finalmente, en los pacientes de entre 70 y 75 años (D-Rd, n=130; Rd, n=131) que fueron tratados con D-Rd,
la mediana de la SLP no se alcanzó a los 61,9 meses frente a los 37,5 meses del grupo de Rd (HR, 0,64; IC del 95 por ciento, 0,45-0,89; P = 0,0079). La tasa de EMR negativa fue del 36,2 por ciento frente al 12,2 por ciento (OR, 4,07; IC del 95 por ciento, 2,16-7,67). La TRG fue del 96,2 por ciento frente al 82,4 por ciento. Un segundo análisis en los principales subgrupos de pacientes informó de un aumento en la SLP, la tasa de EMR negativa y la TRG tras el tratamiento con D-Rd en pacientes de 75 años o más, con enfermedad en estadio III según el Sistema Internacional de Estadificación (ISS, por sus siglas en inglés), con alto riesgo citogenético, insuficiencia renal y plasmacitomas extramedulares. 2 Las principales novedades incluyen:
Datos en pacientes
Los pacientes con
alto riesgo citogenético, definidos como aquellos que presenta una o más de las siguientes alteraciones t[4;14], t[14;16] o del17p, tuvieron una mediana de SLP de 45,3 meses tras el tratamiento con D-Rd frente a 29,3 meses con Rd (HR, 0,57; IC del 95 por ciento, 0,34-0,96) (D-Rd, n=48; Rd, n=44). La tasa de EMR negativa fue del 25,0 por ciento en comparación con el 2,3 por ciento (OR, 14,33, IC del 95 por ciento, 1,78-115,59) y la TRG fue del 91,7 por ciento frente al 75 por ciento (OR, 3,67, IC del 95 por ciento, 1,07-12,55).
Los pacientes con
ganancia o amplificación del 1q21 (Gain1q21 o Amp1q21) alcanzaron una mediana de SLP de 53,2 meses tras el tratamiento con D-Rd frente a 32,3 meses con Rd (HR, 0,63; IC del 95 por ciento, 0,46-0,88) (D-Rd, n=127; Rd, n=120). La tasa de EMR fue del 33,1 por ciento en comparación con el 11,7 por ciento (OR, 3,74, IC del 95 por ciento, 1,92-7,30) y la TRG fue del 95,3 por ciento frente al 85 por ciento (OR, 3,56, IC del 95 por ciento, 1,36-9,30).
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